En la mejor producción de su corta campaña, Paulistinha inició la temporada 2003 al adjudicarse el clásico Juan Shaw, cotejo central desarrollado ayer en el césped húmedo de San Isidro, tras superar por 4 cuerpos a Cara de Buena, al cabo de 2' 13'' 09c para los 2.200 metros.
Fue la primera vez que la hija de Lode corría en la categoría superior, además, era también la primera vez que competía en una prueba de largo aliento, y debía sacarse de encima un interregno de dos meses y medio de inactividad, hecho que significaba una contra grande para sus chances de triunfo.
Debido a ello, quedó condenada al último lugar en las preferencias del aficionado, cerrando las pizarras al momento de largar prometiendo un sport de $21,60 por boleto. Para seguir sumando desventajas, Paulistinha largó fría y quedó última durante los primeros 100 metros, ubicación que dejó recién al ingresar en la recta final. A partir de allí creció la figura de la zaina que se filtró junto a los palos y pasó como un rayo sin escalas hacia el disco, en gran faena de Jorge Valdivieso.
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La Ciudad
