Año CXXXVI
 Nº 49.745
Rosario,
jueves  06 de
febrero de 2003
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Malestar en la comunidad de San Jorge por la decisión del Ministerio
Echaron al médico que salvó la vida a un bebé dado por muerto
Las autoridades del Samco dicen que la medida obedece a cambios "en el servicio de guardia"

Luis Emilio Blanco / La Capital

San Jorge. - El médico Angel Bracco, quien le salvó la vida a un bebé luego de dos horas que otro colega lo diera por muerto, fue despedido el lunes último por las autoridades del Samco a través de una carta documento redactada de puño y letra por la interventora contable, María Fernanda Andrés. La fiscalizadora médica, Analía Pretto, aseguró que la decisión fue adoptada desde el Ministerio de Salud de la provincia y anunció que desde esa cartera se extendió el plazo de la intervención del hospital por el término de un año.
El episodio suma un nuevo capítulo a la saga que tiene como protagonistas a los médicos de ese nosocomio quienes no logran salvar las diferencias internas y generó malestar en muchos sectores de la sociedad que pretenden recuperar el prestigio institucional del hospital más grande de la región. "La salud de San Jorge quedó en manos de foráneos", se quejaron algunos vecinos. En esta historia, el episodio más grave de los conocidos fue el de Jesús Nazareno, un bebé que fue dado por muerto al nacer y que sobrevivió merced a la acción de Bracco.
El médico recibió la noticia de que lo habían despedido del Samco el lunes último y, según sus palabras, no se sorprendió. "Esa medida forma parte de la persecución que comenzó tras el episodio de octubre. Empezaron con los apercibimientos infundados y reiterados, y terminaron echándome", se quejó.
Por su parte Pretto explicó las causas que incidieron en la exclusión del médico. "Dentro del ordenamiento que se está haciendo hubo modificaciones en el servicio de guardia externa. Por esa razón el Samco decidió prescindir de los servicios de Bracco que se desempeñaba en ese sector. Es parte del saneamiento, para lo cual propendemos a alejar a los profesionales que se vieron involucrados en la administración anterior".
También indicó que "a Bracco se le ofreció la atención del dispensario Ramón Carrillo mediante un convenio económico importante pero él no lo aceptó", y agregó que "es un profesional conflictivo que fue partícipe de algunas circunstancias en las que se negó a realizar recepciones de partos, así como traslados que por su actitud resultaron muy costosos para el hospital".
En ese sentido dijo que "si él tiene pacientes para hospitalizar, como cualquier otro médico de la ciudad, podrá seguir internándolos acá y atenderlos con normalidad. El hecho de que haya profesionales que no pertenecen a la planta del Samco o de la provincia, no quiere decir que no tengan la posibilidad de hacer internaciones", aclaró Pretto.
En relación a la ampliación del plazo de intervención dijo que "no tengo información respecto a los motivos de ampliar el plazo, seguramente pensaban que el desorden sería menor al encontrado", explicó Pretto. "En principio el anuncio que me hicieron desde el Ministerio es que durará hasta diciembre. Tendríamos que llegar a fin de año con una situación normalizada para después entregar el Samco a las autoridades que se elijan".

Parto, muerte y milagro
La larga historia de conflictos internos del hospital quedó expuesta en octubre pasado, pocos días después de que un médico diera por muerto a un recién nacido que a las dos horas, y cuando era colocado en un ataúd, fue encontrado con vida. Bracco, se encargó del traslado de la criatura a Santa Fe y según la madre, "Jesús Nazareno no estaría con vida si no fuese por su intervención". El bebé padece problemas en la visión y aún no se conocen las secuelas que le podrían quedar por la falta de atención.
El médico sesanteado denunció a Héctor Cumino, el doctor que atendió el parto y según él esto provocó una persecución por parte del entonces director del hospital, Miguel Angel Lladós, quien actualmente fue trasladado a Sastre. Tras la asunción de Sergio Dussex Ciribé como interventor, Bracco fue apartado de la función administrativa y pasó a desempeñarse en la guardia del nosocomio hasta el lunes cuando fue despedido del hospital.



Bosco dijo que la medida es "parte de una persecución".
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