La capacidad creativa de los estudiantes puede contribuir a la mejora de la calidad de vida de la población. Este es uno de los argumentos del proyecto Ideas (Invención de Estrategias Aplicadas a la Salud) concretado finalmente en experiencias llevadas adelante en la ciudad, de septiembre a diciembre del año pasado. En el marco del proyecto, diez grupos de estudiantes de diferentes carreras de la Universidad Nacional de Rosario trabajaron durante tres meses en centros de salud municipales, aportando sus conocimientos desde distintas áreas.
Uno de ellos fue el grupo formado por 8 estudiantes de las carreras de Arquitectura, Antropología y Ciencias de la Educación que trabajó en el barrio Parque Casas, coordinados por el médico generalista Marcelo Sauro y la trabajadora social, Fabiana Martino. A partir del trabajo compartido, los jóvenes lograron modificar la incomunicación entre los habitantes del barrio y las instituciones. Con ese objetivo realizaron una feria de la que participaron más de 40 expositores.
De las ideas a la realidad
"Nos enganchamos a partir de una charla informativa realizada en Arquitectura, donde explicaron de qué se trataba el proyecto Ideas", relata Natalia Zanier, estudiante de esa carrera y miembro del equipo de Parque Casas. "Me entusiasmó la idea de trabajar interdisciplinariamente y abrirme a otros puntos de vista. Además supuso todo un desafío ver cómo se puede ayudar a otros con los conocimientos adquiridos", explicó.
Todos los miércoles el grupo formado por los ocho estudiantes acudía al centro de salud. Lo primero fue hacer un relevamiento, a partir de las instituciones barriales, para conocer cuáles eran las preocupaciones y los problemas que aquejaban a la comunidad. Las estudiantes de Antropología aportaron el método adecuado para encarar el relevamiento. Las encuestas revelaron numerosas necesidades en el barrio, pero lo que sobresalía era la falta de comunicación entre las instituciones entre sí y con la gente.
El equipo detectó que si bien en el barrio funcionaban más de 50 instituciones, cada una lo hacía por su lado, y en muchos casos no se conocían entre sí, invalidando la posibilidad de complementarse. "Vimos que no había interacción ni complementariedad entre una y otra, y que si lográbamos que se conocieran podrían potenciarse e intercambiar sus recursos", afirma Paola Iglesias, estudiante de Antropología.
Preparación del encuentro
Una vez detectada la necesidad, las estudiantes comenzaron a diseñar estrategias. Para ello plantearon múltiples ideas que fueron acotando, hasta que finalmente decidieron convocar a miembros de las instituciones y particulares para armar un encuentro barrial, donde todos pudieran dar a conocer las actividades que realiza. Los objetivos fueron afianzar los vínculos de la comunidad y crear un espacio de intercambio de recursos.
Y se pusieron manos a la obra. Lo primero fue formar una comisión organizadora con personas del barrio. "Nuestra tarea no fue de dirección sino de acompañamiento de la gente", aclara Iglesias. "Previamente se realizó una reunión para ver cómo veían la propuesta. La gente enseguida se entusiasmó", acota Zanier.
Las estudiantes de Arquitectura diseñaron el predio donde se realizaría el encuentro. La cita tuvo lugar en la plaza ubicada en Sorrento y Casiano Casas, donde 49 expositores mostraron los productos elaborados en los microemprendimientos. Las instituciones exhibieron sus actividades.
"Uno de los logros fue la apropiación de la plaza. Ahora le quieren poner nombre y organizar otras actividades. Los vecinos no se cansaban de repetir esto no termina acá", explica Iglesias.
La actividad logró los objetivos propuestos y al mismo tiempo "contribuyó a fomentar la solidaridad, la comunicación y a darse cuenta cuánto necesitan compartir con los demás", concluyeron las estudiantes.
El eje central del trabajo grupal se basó en el concepto integral de salud, que abarca no sólo lo físico, sino también los aspectos psíquicos, sociales y culturales.
El proyecto Ideas, diseñado por estudiantes del último año de la carrera de Psicología de la Universidad Nacional de Rosario, apunta a incluir en los centros de atención primaria a estudiantes del ciclo superior de todas las carreras no orientadas tradicionalmente a la salud, con el fin de que surjan nuevas estrategias orientadas a la solución de problemas sanitarios y otros relacionados con la calidad de vida.
La Ciudad
