La campaña sojera empieza a sufrir la falta de agua

Prácticamente finalizada, la siembra de soja de esta campaña cubriría alrededor de 12,7 millones de hectáreas, sobre una superficie total proyectada de 12,8 millones, de acuerdo con el último relevamiento realizado por la Bolsa de Cereales porteña.
En la región, la preocupación estaba centrada en la soja de primera, por el efecto de la continuidad de los días calurosos y sin lluvias, un mix peligroso para una etapa crítica de cultivo.En Chaco, la presencia de perfiles de suelo excesivamente húmedos impedían la concreción de los implantes.
De continuar ese crecimiento en los términos actuales, la campaña de este ciclo resultará la más voluminosa que haya obtenido el país que, con rindes que se ubiquen en la media de las últimos ciclos agrícolas, dejará una zafra nacional del orden de los 34/34,5 millones de toneladas.
Además, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que la soja temprana, de primavera, en la región litoraleña comenzó a recolectarse, con rendimientos que promediaron los 22 qq por hectárea, unos tres más que los obtenidos en la región durante el período agrícola anterior.
Por otra parte, desde el sector privado se reiteró que la cosecha sojera de este año resultaría superior a los guarismos proyectados por el gobierno e incluso por la Bolsa de Cereales, debido a que numerosos potreros que no pudieron implantarse con maíz, y casi sobre las fechas límites, también habían comenzado a sembrarse con la oleaginosa de ciclo corto.
En tanto, con rindes dispares y en zonas aisladas de la región núcleo comenzó la recolección del maíz. La zafra se inició en Entre Ríos y en algunas zonas del centro-norte de Santa Fe.
En el primer caso, los rendimientos del cultivo, por hectárea rondaron los 80 qq, mientras que en la región santafesina se obtuvieron lotes con rindes de hasta 100 qq por hectárea. La cosecha de trigo terminó con una producción de 12,16 millones de toneladas, la más baja en siete años.