Año CXXXVI
 Nº 49.739
Rosario,
sábado  01 de
febrero de 2003
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Una familia colombiana sacrificó a un niño de 2 años

Padres, abuelos, tíos, hermanos y primos sacrificaron a un niño de dos años mientras danzaban y entonaban cantos religiosos en un espeluznante rito que tuvo lugar en una vivienda en el municipio de Choachí, 50 kilómetros al sur de Bogotá.
Miembros del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) de la Fiscalía descubrieron el cadáver del niño el martes pasado, tras ser alertados por los aterrorizados vecinos de Choachí, una localidad del central departamento de Cundinarmarca.
Vestidos con túnicas blancas, unas 17 personas -entre ellas 7 menores de edad, y 15 de ellas de la misma familia-, danzaban cerca de donde estaba sepultado de pie el cuerpo del chico, cuando fueron encontrados por las autoridades. "Yo soy Cristo y lo puedo regresar a la vida", dijo la madre del menor, identificada como Nancy Raigoza, según dijeron los investigadores del CTI.
Los niños de la familia Raigoza contaron que los mayores, entre ellos sus propios padres, acostaron al niño en el piso y comenzaron a saltar sobre él con el resto de los parientes, hasta darle muerte.
"Es lo más increíble que he visto en mis 25 años de investigador. Estaban como poseídos por la música. Del niño decían que no estaba muerto, que lo estaban purificando", dijo el director del CTI en la zona oriental de Cundinarmarca, Orlando Serrano.
Según el director del CTI en esa zona, los parientes del niño dijeron que "a ellos los podemos revivir cuando queramos", por lo que las autoridades sospechan que habría más víctimas.
Los 10 adultos que participaron en el rito fueron arrestados y están bajo órdenes de la Fiscalía, que intenta establecer quién es el líder del grupo y qué los indujo a practicar esa ceremonia. Tres de los menores, cuyas edades oscilan entre los 14 y los 16 años, deberán responder ante un juez especial, mientras que los otros cuatro, de entre 3 y 6 años, fueron enviados a una institución de bienestar familiar. (AFP)


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