La semana próxima desembarcará en Santa Fe una misión del Banco Mundial para analizar las condiciones de desembolso del crédito otorgado a la provincia, suspendido luego del default nacional. Este será el primer paso de un trámite que permitirá que en dos meses el organismo internacional libere 50 millones de dólares correspondientes al segundo tramo del préstamo y, en cuatro o cinco meses, los 130 millones restantes. El dinero fresco será enteramente utilizado para refinanciar deuda a menor tasa de interés y plazos de pago más prolongados.
La provincia recibió antes del default 150 millones de dólares del crédito, que totaliza 330 millones. La reanudación del programa de asistencia financiera para la reforma provincial, obligará a modificar las proyecciones presupuestarias para el año 2003, que ya prevé un ligero superávit fiscal, sin contar con esos recursos.
El vicegobernador Marcelo Muniagurria, a cargo del Poder Ejecutivo, lo explicó así a La Capital: "Las estimaciones del ejercicio 2002 indican que cerró equilibrado pese a que el déficit originalmente previsto era de 100 millones de pesos" por lo cual, con este crédito, las proyecciones para este año son "infinitamente" mejores.
Estas previsiones alentarían la decisión de utilizar los fondos del Banco Mundial para cancelar deuda tomada a tasas superiores a las que presta el organismo.
Después de haber dialogado con el gobernador Carlos Reutemann, el vicegobernador decidió ayer mediatizar la febril actividad que recuperó la Casa Gris en los últimos días. Entre otras cosas, para comenzar a entrelazar el que espera sea el moño de la gestión: el acceso a 180 millones de dólares por parte del Banco Mundial. En rigor, un dinero extra que permitirá un oxigenado último año de gestión y entregar en mejores condiciones financieras la provincia al próximo gobierno.
Tanto es así que Muniagurria dijo que "el dato sobre la proyección del presupuesto se comunicará en las últimas horas al Banco Mundial mediante una misiva que está elaborando el Ministerio de Hacienda". La minuta pretende oficiar de alfombra roja para la visita que tiene previsto realizar la semana venidera a la provincia una delegación de dicho organismo internacional.
Esta misión se abocará a analizar las condiciones para el desembolso de los dos tramos del crédito que restan y que se ha destrabado a partir de la firma de la carta de intención entre el gobierno nacional y el Fondo Monetario Internacional .
"Teníamos previsto llegar al déficit equilibrado en el 2003 pero lo hemos alcanzado en la proyección del presupuesto 2002", se agrandó el vice, quien subrayó que "eso en un año extremadamente complicado como el que pasó más que una administración prolija es una proeza".
Muniagurria no se privó de recordar que "cuando en diciembre de 2001 aprobamos el presupuesto la oposición se retiró ofuscada afirmando que era impensable aprobarlo en esas condiciones", y agregó que "cuando propusimos un presupuesto 2003 con el objetivo de obtener un pequeño superávit y dados los datos que le estoy dando eso está más cercano de lo que todos preveían".
El destino
De funcionar todo a pedir de boca del gobierno santafesino, en unos dos meses estaría recibiendo un primer desembolso del Banco Mundial de 50 millones de dólares y en unos cuatro o cinco meses, los restantes 130 millones. Pero sobre el particular, el vicegobernador Marcelo Muniagurria optó por ser muy cauteloso.
"Aparentemente no habría cambios en la tasa de interés y el plazo en que fue oportunamente acordado ese crédito", dijo. Pero aclaró que luego de la devaluación "hay que revisar algunas cuestiones porque ha habido cambios en las circunstancias generales y al cambiar éstas presumiblemente también se pretendan cambiar las contraprestaciones de la provincia o la repriorización del crédito".
De todos modos, el vicegobernador aclaró que la provincia está en condiciones de recibir el crédito: "Estamos demostrando nuestra capacidad de cumplir con los presupuestos", dijo.
Originariamente el grueso de los fondos que provendrían del Banco Mundial se destinarían a canjear deuda de corto plazo y a alto interés, por deuda a largo plazo y a intereses más bajos, pero hoy el gobierno provincial se muestra remiso a confirmar que ese sigue siendo el objetivo.
El rubro al que estaba destinado el crédito -el más importante que el Banco Mundial tiene firmado con el país- era el genérico proyecto de reforma provincial.
El ministro de Hacienda, Miguel Angel Asensio, quien formalmente se encuentra de vacaciones hasta mañana, viene monitoreando personalmente los preparativos para el nuevo encuentro con los funcionarios que el Banco Mundial enviará a la provincia. "Hemos cumplido con todas las pautas que habíamos comprometido", le dijo Asensio a La Capital pero guardó el mismo tono cauteloso que el titular del Ejecutivo al mencionar que "ahora lo que tenemos que hacer es interiorizarnos bien de los alcances que tiene la carta de intención firmada por el gobierno nacional y el FMI, y el rol que en la misma se les otorga a las provincias. Ellos pueden haber modificado las condiciones generales que, de hecho, ya se cambiaron porque este crédito fue gestionado y acordado por el Banco Mundial antes de la devaluación".
En idénticos términos se pronunció ayer el secretario de Finanzas Públicas, Eduardo Maieu, al sostener que "para el segundo desembolso debíamos tener ahorro corriente positivo o igual a cero, cosa que estamos cumpliendo y un superávit para el tercer desembolso del 4 por ciento de recursos corrientes que también se puede cumplir".