Año CXXXVI
 Nº 49.737
Rosario,
miércoles  29 de
enero de 2003
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"Una mejor atención no requiere más recursos"
Luego de una beca en la Escuela Andaluza de Salud Pública, Alberto Simioni ideó una propuesta para el Vilela

Belén Travesaro / La Capital

Luego de un curso de perfeccionamiento de dos meses sobre gestión sanitaria en la Escuela Andaluza de Salud Pública, que funciona en Granada (España), el pediatra rosarino Alberto Tomás Simioni, jefe de consultorios externos del Hospital de Niños Víctor J. Vilela, elaboró un proyecto para mejorar la atención de los pacientes que concurren a dicho centro asistencial. El plan comenzó a implementarse sólo en pacientes que consultan por asma o casos crónicos con pluripatología. En el futuro la idea es comprometer a todas las áreas del hospital. La capacitación de Simioni surgió como consecuencia de una beca otorgada por la Fundación Hospital Español de Rosario. El especialista se hizo acreedor de la beca en un concurso abierto a todos los trabajadores del sector público y del Hospital Español.
"Luego de asistir a cursos y conocer hospitales modelo en gestión de salud, surgió este proyecto que puede ser de utilidad para mejorar la atención en el Vilela. Su implementación no requiere necesariamente de una inversión económica", dijo el profesional.
En diálogo con La Capital el pediatra explicó los fundamentos de su propuesta. "Un lema que escuché en todos los centros de salud españoles es que ellos tienen claro qué pueden hacer y qué no. Y lo que sí pueden, deben hacerlo lo mejor posible. Aquí sucede que por querer hacer todo, lo hacemos mal", enfatizó.
Para el proyecto tomó en cuenta conceptos como el de gestión por proceso, que comprende la secuencia que abarca desde la necesidad de la consulta hasta el acto médico propiamente dicho. Al respecto explicó que es necesario tener claro que en ese proceso sólo hay que hacer lo que otorga un valor agregado a la consulta. Es decir, "realizar únicamente las técnicas diagnósticas que sean necesarias".
Basándose en estos conceptos desarrolló un plan de calidad con varios puntos: por un lado identificar los procesos asistenciales del hospital, después priorizar en cuáles se va a trabajar y finalmente determinar quién se hará cargo de cada proceso. "Empezamos a materializar la propuesta en dos procesos asistenciales: asma en la infancia y pacientes crónicos con pluripatología debido a que el personal de estas áreas está motivado para generar un cambio cultural", aclaró Simioni.

Acto único
En el caso de niños con asma, el doctor Simioni mencionó que la metodología de trabajo apunta a evitar que el paciente deba concurrir varias veces al hospital, intentando evacuar todas las consultas en un día. "Para ello se requiere una reestructuración de la asignación de turnos, lo que se llama acto único", dijo.
Lo antedicho también se ajusta a los pacientes con multipatologías. Este es el caso de los chicos nacidos antes de término, que padecen secuelas neurológicas, oftalmológicas y problemas cardiovasculares. "En estos casos -explicó Simioni- hace falta aceitar la coordinación entre los especialistas para que en un mismo día se atiendan todas la necesidades del paciente".
A partir de marzo próximo, el curso de gestión de salud de la Escuela Andaluza será dictado en nuestra ciudad merced a un esfuerzo conjunto de dicha escuela con la Universidad de Granada y la Fundación Hospital Español de Rosario. Además, está en proyecto la instalación local de una sede de la Escuela.

Visita a hospitales españoles
Durante la capacitación en la Escuela Andaluza, el pediatra Alberto Tomás Simioni visitó diferentes hospitales con el objetivo de "aprender de quienes hacen mejor las cosas", dijo el profesional becado por la Fundación Hospital Español de Rosario.
Uno de los sitios visitados fue el Hospital Materno Infantil Virgen de las Nieves (en Granada), donde se interiorizó del tratamiento que reciben los niños allí alojados, en las etapas de pre-anestesia, el acompañamiento al quirófano y la posterior internación. "Todas cuestiones imitables y que requieren pocos recursos", dijo. "Ningún niño puede entrar al quirófano si no es de la mano de un enfermero disfrazado de payaso", comentó al respecto. Esta tarea las realizan también los voluntarios y alumnos de las escuelas de arte.
Las salas de internación disponen también de un área destinada al juego con computadoras conectadas en red que manejan un programa de la salud pública andaluza llamado "Mundo de estrellas". Los niños pueden chatear permanentemente con compañeros de la escuela o chicos alojados en la misma institución.
Aquí en Rosario, el Hospital Vilela también cuenta con una sala de juegos que funciona a partir de la creación del Servicio de Oncohematología. La sala posee un programa de juegos que pueden utilizar los niños internados en cirugía, así como los que están en el sector de quemados y los pacientes crónicos y paliativos.


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