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Los planes de Duhalde

El 22 del corriente, Marcelo Laino abogaba por el mantenimiento del "plan Duhalde II" que, según su opinión, "perfeccionaría" el plan de Menem. Lamento decirle que ello no es posible, porque ya no quedan industrias para fundir con "aperturas" de la economía; ya no quedan empresas del Estado para regalar o negociar con los amigos y quedan muy pocos empleados que aportan a los sindicatos, así que esa torta tampoco resulta demasiado apetecible para el inefable riojano. Además, ya no nos prestan más dólares que podamos desviar a Suiza u otros paraísos fiscales. Las pocas armas en buenas condiciones que teníamos ya las negociamos con nuestros amigos traficantes, y las que restan no las quiere nadie. De tanto lamerles las botas a nuestros amigos yanquis, se cansaron de nosotros y se buscaron otra amiguita. Nos enemistamos con los árabes por incumplir promesas de campaña y con los israelíes por no investigar los atentados. ¿No somos geniales? Quedamos mal con Perú por venderle armas a Ecuador y con los últimos por venderles chatarra. Es claro que no se puede perfeccionar el plan de Menem. Lo hizo todo perfecto. Nuestra Argentina está destruida y llevará décadas recuperarla.
Hugo Aversa Pileci