Damián Peña, el joven de 25 años que intentó apuñalar al actor y productor Adrián Suar, fue declarado "inimputable" y por lo tanto sobreseído por la Justicia. Quedó alojado en el hospital Borda, donde será sometido a un tratamiento psiquiátrico.
Según señalaron fuentes del caso, la jueza María Laura Garrigós de Rébori, a cargo de la causa, tomó la decisión luego de las observaciones de los primeros médicos que atendieron al muchacho y de presenciar cómo se mostró el detenido durante la indagatoria. El joven habría estado "enajenado de sí mismo" cuando se sentó frente a la jueza mientras le tomaban la declaración.
Así, la jueza dispuso que el joven quede internado en el hospital neuropsiquiátrico porteño y trasladó las actuaciones a la Justicia civil, donde se determinará de qué modo se sigue con la atención psíquica y personal del encartado.
Para colaborar con esas actuaciones, Suar se dirigió ayer a los tribunales donde declaró ante los instructores, a quienes les entregó la cinta con la grabación de las cámaras de seguridad montadas en la entrada de Pol-ka, donde se registró la agresión, dijeron allegados al productor.
El ataque
El hecho ocurrió anteayer por la tarde, cuando Suar, gerente de programación de Canal 13, llegaba a su productora Pol-ka, en avenida Córdoba y Jorge Newbery, en el barrio porteño de Colegiales, y un hombre se le acercó imprevistamente y lo amenazó con un cuchillo casero tipo Tramontina.
Un custodio, identificado como el suboficial de la Policía Federal Rodolfo Polke, que había ido a buscar a Suar al Aeroparque, advirtió rápidamente lo que pasaba y alcanzó a frenar al joven, sacarle el cuchillo y mantenerlo reducido hasta que personal de la comisaría llegó a Pol-ka para arrestarlo.
Mientras esperaban, Suar se acercó para preguntarle al agresor por qué lo había amenazado, pero el joven no le contestó. "Pensé que me quería abrazar", comentó más tarde el productor, pese a que después tuvo que entender que "evidentemente el fin era matarme".
El muchacho, identificado como Damián Peña, de 25 años, vivía a cinco cuadras de Pol-ka y había sido visto en la zona varias veces, e incluso habría tenido días pasados un altercado con un productor, según trascendió.
Pero Peña ya habría tenido otros problemas: algunos vecinos aseguraron que varias veces fueron agredidos por el muchacho. Incluso habría tenido abierta en la Justicia correccional una causa por daños, trascendió de fuentes tribunalicias.
Peña pasó la noche en una celda de la comisaría 29 y ayer a la mañana fue llevado a los tribunales de la calle Lavalle al 1600, para ser interrogado por la jueza Garrigós de Rébori.
La magistrada dispuso que fuera sometido a pericias médicas que determinaron el detenido era "apto" para declarar, aunque aclararon que podía llegar a ser inimputable.
Fue así como más tarde el joven fue llevado ante la jueza, el fiscal y los empleados del tribunal. Cuando comenzó el acto judicial, Peña se mostró "fuera de sí", como "enajenado de sí mismo", sin poder controlarse, dijeron las fuentes.
Según se señaló, la jueza se sintió "angustiada" por tener que indagar a un muchacho en esas condiciones, "visiblemente afectado en su psiquis" y, tras dar por terminada la indagatoria, dispuso que lo remitieran al servicio psiquiátrico central de varones Unidad 20, que funciona en el Hospital Borda, en el barrio de Barracas. (DyN)