En la jornada de ayer el plantel de Central consumió el último doble turno de entrenamiento antes de completar la pretemporada en las sierras de Tandil. La rutina de los canallas arrancó desde muy temprano con análisis de orina, sangre y electrocardiogramas ordenados por el médico Pablo Colella y luego los jugadores cumplieron con una sesión con pelotas de la mano de Miguel Angel Russo. Hoy el trabajo será muy liviano en Palos Verdes.
En esa instancia, el entrenador de Central repartió pecheras y distribuyó a una parte del plantel de la siguiente manera. En este equipo la primera línea estuvo compuesta por Daniel Díaz, Talamonti y Cárdenas; mientras que el medio alistó a Ferrari, Daniel Quinteros, Vitamina Sánchez y Papa; y más arriba completaron Marcelo Quinteros y Gustavo Barros Schelotto. En este ejercicio no participaron los delanteros, quienes se quedaron peloteando junto a Hugo Gottardi (ayudante de campo) a los arqueros Castellano y Julio César Gaona.
En tanto, los rivales que se pusieron enfrente de los mencionados fueron Leonforte, Gasparini y Fassi (primera línea); Andrés Díaz, Acoglanis, Erroz y Encina; Ruggiero y Pino.
Si bien Russo no lo especificó después de la práctica matutina, las indicaciones que utilizó el conductor auriazul mientras dirigía la práctica fueron por demás de elocuentes. El DT quería que sus jugadores le dieran un destino seguro a la pelota y no se desconcentraran. Por eso en varias oportunidades utilizó el clásico "estamos apurados, vamos a mirar a nuestros compañeros", para explicar el objetivo del trabajo.
Por su parte, la cita de la tarde estuvo dedicada a terminar con las últimas evaluaciones físicas del profesor Guillermo Cinquetti, antes de viajar mañana a las 13 desde el Gigante hacia Tandil.
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La Ciudad
