cartas

Vivir en el recuerdo o volver a construir

Los argentinos nos vemos invadidos por la crisis, pero es nuestro deber que la misma no se estacione para siempre, por eso es bueno recordar que en 1949 Argentina era una potencia mundial en automovilismo, ya que se llevaron a cabo cuatro carreras internacionales. La primera en Palermo la ganó Alberto Ascari, la segunda también en Palermo la ganó Oscar Alfredo Gálvez (primera victoria de un piloto argentino ante los ases mundiales). La tercera, en Mar del Plata, el vencedor fue Juan Manuel Fangio y en la cuarta, en Rosario, venció Guiseppe Farina. En el circuito Parque Independencia los ases del automovilismo grabaron esta historia: 1947, 1º Aquiles Varzi; 1948, 1º Jean Pierre Wimille; 1949, Guiseppe Farina (primer campeón de automovilismo); 1950, 1º Gigi Villoresi. Pilotos argentinos y europeos hermanados en una competencia donde la victoria les brindó felicidad a la escudería y alegría a sus compatriotas. Ante la crisis nos quedan dos opciones: o vivimos recordando momentos felices del pasado y pedimos como el hincha "no... no te vayas Argentina hermosa de los años 40... quiero verte otra vez", o seguir el sabio consejo de Rudyard Kipling: "Si al contemplar las cosas a la que diste tu vida se han deshecho, agáchate y constrúyelas de nuevo... aunque sea con gastados instrumentos".
Italo León