Casilda. - A más de nueve años del cierre de la Cooperativa Agrícola Ganadera de Chabás el grupo de ex trabajadores que inicio juicio laboral todavía no logró cobrar sus indemnizaciones y teme que se desvaloricen los bienes que faltan subastar para afrontar las deudas.
El establecimiento dejó de operar el 31 de agosto de 1994 y en septiembre pasado quebró. Un mes después la Justicia ordenó el pronto pago en favor de los empleados, pero nunca recibieron un peso a pesar de que fueron rematadas algunas instalaciones de la empresa.
Cuando la cooperativa quebró varios trabajadores aceptaron arreglos de pago y otros optaron por recurrir a la Justicia para cobrar el total de sus acreencias, pero hasta el momento no tuvieron suerte. Ocho de los cuarenta empleados que fueron despedidos esperan cobrar un total de 150 mil pesos, pero el tiempo pasa y el dinero no aparece.
Hasta el momento fueron rematadas una planta de silos, una estación de servicio y un supermercado que la firma poseía en Villada, pero los ex trabajadores no cobraron porque los fondos resultaron afectados a privilegios del Banco Nación.
Desvalorización
Si bien faltan por subastar inmuebles que la firma tiene en Chabás, los ex empleados temen que pierdan valor porque "se están deteriorando con el tiempo ya que el remate no salen", dijeron.\De todas maneras, de los inmuebles pendientes de subasta sólo están paralizados la casa central de la ex cooperativa y la planta de silos ya que el semillero y la estación de servicio están alquiladas, lo cual resulta extraño para los ex trabajadores. "Desconocemos en qué condiciones se desarrollan las actividades y dónde va la plata del alquiler", señalaron.