Los restos del fotógrafo que murió en Punta del Este al intentar salvar a una de las amigas de la hija del animador Marcelo Tinelli llegaron ayer al país, en medio de muestras de dolor y elogios a la actitud heroica del reportero. El cuerpo de Gabriel De Felice, de 43 años, padre de dos chicas adolescentes y fotógrafo de la revista de espectáculos Pronto, arribó a las 16.30 al aeroparque Jorge Newbery desde la ciudad balnearia uruguaya junto a familiares y amigos.
Los familiares tenían previsto inhumar al infortunado fotógrafo en el cementerio de la Chacarita, de la Capital Federal. Anoche la esposa de De Felice decidió que sus hijos tuvieran la oportunidad de poder ver y despedir los restos de su padre.
Los familiares, amigos y hasta el propio Marcelo Tinelli -protagonista del incidente-, resaltaron la actitud heroica del reportero gráfico y reconocieron sus cualidades personales y profesionales.
De Felice murió anteayer a la tarde frente a la playa La Boyita de Punta del Este, mientras intentaba rescatar a una amiga de Micaela, hija del conductor televisivo, quien no podía salir del agua, según explicaron los protagonistas del hecho.
Al respecto, la Asociación de Reporteros Gráficos (Argra) manifestó que "todas las versiones recogidas hasta el momento, dan cuenta de una heroica reacción por parte de nuestro compañero fallecido". Por su parte, Tinelli afirmó que anteayer fue "un día desgraciado" por la muerte de De Felice y envió un "sentido pésame a toda la familia" de la víctima.
"Fue una cosa muy desgraciada, era un día tranquilo, estábamos en casa y mis hijas a las 4 de la tarde me dicen que iban al mar a tomar sol en la playa. Acá el mar no es fácil, es peligroso, pero ni pensé que se iban a meter al agua", recordó.
"Me encontré con un panorama dantesco cuando bajé. Tomaba sol y por intuición dije: vamos a ver cómo están las chicas", relató Tinelli, quien dijo que mientras bajaba a la playa apareció su su hija "gritando que Clarita estaba en el agua y no podía salir".
El conductor dijo que el mar había arrastrado a la niña unos "150 metros" del lugar donde había ingresado y que cuando decide ingresar al agua para sacarla, lo acompañó "el fotógrafo Nicolás Bovio", de Caras.
"Me tiré al agua con Nico, la agarramos a Clarita, pero ella decía que había otra persona que la vino a sacar, la sacamos a Clarita y después nos enteramos que había otra persona", reiteró.
"No tenía miedo de nada"
Asimismo, Martín Rodríguez, fotógrafo de la revista Caras y ex compañero de De Felice -quien hasta hace dos meses trabajaba para ese medio-, destacó la capacidad profesional de su ex compañero, de quien dijo que "no le tenía miedo a nada y no dudó" en arrojarse al mar para salvar a la pequeña.
"Era muy jugado, nunca le tenía miedo a nada, él estaba siempre un paso más adelante de todos, ha hecho muchas primicias, era muy buen fotógrafo y muy buen paparazzi, él no dudó en tirarse a rescatar a la nena", expresó Rodríguez, quien fue una de las últimas personas en ver a de Felice antes de su muerte.
Pese a que hasta última hora de anteayer se había informado que De Felice había fallecido ahogado, el cónsul argentino en Punta del Este, Julio Ayala, confirmó ayer que el fotógrafo murió por una hipotermia que derivó en un paro cardíaco.
"El médico forense me dijo que la muerte del fotógrafo se produjo por hipotermia. No es que se ahogó, sino que estuvo mucho tiempo en el agua y sufrió un paro cardíaco", explicó el diplomático. (DyN)
La Ciudad
