Mauricio Maronna / La Capital
Pese a su desmentida, José Manuel de la Sota anunciará en los próximos días su decisión de no competir por la Presidencia. "El Gallego se toma vacaciones... ¿Cómo se le ocurre, justo ahora, distanciarse de la campaña?", dijo ayer a La Capital un operador full time del gobierno.
El gobernador (actualmente en uso de licencia) carga sobre sus espaldas con el reclamo de los intendentes justicialistas de su provincia que, con estupor, observan los sondeos para la Gobernación: el radical Rubén Martí es el mejor posicionado para ocupar la Casa de las Tejas. Sin De la Sota, la UCR volvería al poder.
"¿Por qué me voy a bajar ya si la interna es un despelote? No se sabe ni cuándo ni cómo se votará", repite el cordobés en su intimidad, dando a entender que su renunciamiento es cuestión de tiempo. Los infidentes que se acumulan alrededor de Eduardo Duhalde están desencantados con el discurso "engolado y descafeinado" del gobernador, pero mucho más con los números que arrojan las encuestas nacionales.
A De la Sota también se lo comió la ansiedad por aparecer en la grilla de postulantes apenas Carlos Reutemann dijo que no aceptaba ser precandidato. "El Gallego quedó pegado como el «muletto» del Lole desde ese mismo instante. Debió haber esperado un tiempo más para lanzarse", explicó uno de los barones del conurbano que circulan por la Rosada.
Sin embargo, como una muestra de querer volver al terruño, De la Sota confirmó que el 9 de marzo se harán las internas y el 8 de junio se elegirá al futuro gobernador. Una clara maniobra para separar los comicios provinciales de los nacionales.
En las últimas horas, una versión ganó cuerpo en el duhaldismo de paladar negro: De la Sota estaría sondeando un posible acuerdo con Carlos Menem. "Sería la reedición de lo que ocurrió en el 99: el Turco logró que el justicialismo gane por primera vez en Córdoba desde la recuperación de la democracia", confió la fuente, que agregó un dato sorprendente: "(Alberto) Kohan dijo hoy (por ayer) que lo están esperando con las manos abiertas".
Mientras De la Sota apresta a bajarse, Felipe Solá (confirmando un adelanto de La Capital publicado en noviembre pasado) amaga con subirse a una postulación presidencial. El gobernador bonaerense habría sondeado en su momento a Jorge Obeid como potencial candidato a vice, aunque éste descalificó la especie.
La interna justicialista es un sendero que se bifurca cada día más.
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La Ciudad
