La galería de personajes que puede convocar Soledad no tiene límites. Cuatro chicas de Salta del grupo de fans "Mi corazón es tuyo" habían recorrido 1.500 kilómetros para verla. Y ni se mosquearon cuando dijeron que el recital se suspendía. "Ella nos enseñó a querer el folclore", dijo Magui, de 30 años. Romina arribó desde Tucumán y viajó 18 horas en un micro para llegar hasta Arequito. "Para venir acá tuve que vender mi cadenita de oro de mis 15, que acabo de cumplir. Era un regalo de mi madrina, que si se entera me mata", dijo entre risas. Con el mismo entusiasmo, "la Betty de Arequito" estaba radiante pese a sus 60 años. Integrante del club "Por siempre amigos" durmió toda la noche en un banco de la estación terminal del pueblo para disfrutar a su ídola. "La Sole me sacó de una depresión muy grande, que sufrí después de participar en la guerra de Malvinas como enfermera. La seguiría hasta el fin del mundo", enfatizó.
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La Ciudad
