Muerto a golpes en presunto ajuste de cuentas

El cadáver de un muchacho de 23 años apareció en un baldío de la zona sur de la ciudad. No hay sospechosos

Un muchacho de 23 años fue asesinado a golpes y su cuerpo apareció tirado en un baldío de la zona sur de la ciudad. Hasta anoche los investigadores no disponían de pistas ni de sospechosos sobre el crimen, pero aseguraron que la víctima había muerto como consecuencia de violentos golpes en la cabeza y resaltaron que tenía "numerosos antecedentes penales por robos calificados", por lo que orientan la pesquisa hacia un ajuste de cuentas.
El cuerpo de Gerardo Ezequiel Alegre, tal cual fue identificado en el Instituto Médico Legal, fue encontrado la mañana de ayer por un lavacoches que trabaja en un playón contiguo al descampado de Regimiento 11 y España. El muchacho fue hasta el baldío para dejar una bolsas con basura y se sorprendió ante el macabro hallazgo. Enseguida la voz corrió por todo el barrio y numerosos vecinos se agolparon en el lugar protestando por la falta de seguridad.
Aunque en un primer momento los investigadores dijeron que se habría tratado de una muerte "no violenta" y sostuvieron que "el cuerpo estaba limpio de golpes", la autopsia realizada la tarde de ayer determinó que Alegre tiene un "garrotazo en la cabeza, otro en un pómulo y otros golpes en distintas partes del cuerpo", según confió un vocero de la seccional 21ª con jurisdicción en el lugar.
Asimismo, las fuentes manifestaron que la muerte dataría de "una 12 horas antes del hallazgo" y no sabían a ciencia cierta si el asesinato se produjo en el lugar donde apareció el cadáver o si el joven fue golpeado en otro lado y caminó hasta morir allí".
Los mismos voceros policiales dijeron que Alegre tenía como último domicilio una vivienda del barrio Las Flores pero hasta anoche no había en la subcomisaría de la zona ninguna denuncia por averiguación de paradero. "Estamos tratando de localizar a los familiares para saber acerca de los últimos pasos del muchacho. Pensamos que así podremos reconstruir su historia y acercarnos a los homicidas, ya que en el lugar nadie vio ni escuchó nada", dijeron los investigadores.
Finalmente, desde la comisaría 21ª se sostuvo que Alegre tiene "un frondoso prontuario y eso lleva a pensar que el origen de todo es un ajuste de cuentas entre delincuentes".

La policía buscó pistas en Regimiento 11 y España.