Santa Fe.- Una banda de encapuchados fuertemente armada perpetró un audaz robo en la sede del Rectorado de la Universidad Nacional del Litoral, donde a pesar de acceder a la tesorería y provocar serios destrozos, sólo pudieron llevarse una videograbadora, algunas remeras y otros elementos de poco valor. Sin embargo, los investigadores policiales presumen que el verdadero móvil del golpe apuntaba a obtener unos 25 mil pesos recaudados durante el actual período de inscripción universitaria, dinero que ya había sido depositado en las cuentas universitarias.
De acuerdo a lo trascendido de la investigación que lleva adelante la delegación local de la Policía Federal, los maleantes ingresaron cerca de las 8 al recinto del Rectorado, ubicado en bulevar Pellegrini al 2700, previo haber accedido a la vecina Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales, cuyas aulas se encuentran en la misma manzana, sobre calle Cándido Pujato.
Los pesquisas sostienen que los delincuentes habrían ingresado al edificio universitario durante la noche del sábado, mientras en la facultad se desarrollaba una concurrida cena y baile para despedir el año. Entonces, una vez finalizada la fiesta, habrían quedado agazapados a la espera de dar el golpe.
Cuando el sol ya iluminaba sus pasos los maleantes ingresaron al Rectorado, amenazaron con armas de fuego y amordazaron a un guardia de seguridad del lugar y a un circunstancial acompañante y pusieron manos a la obra. Se dirigieron directamente a las oficinas del Rectorado y de la tesorería, situadas en el primer piso del amplio edificio y allí provocaron graves destrozos en el mobiliario.
El guardia de seguridad, identificado como Diego Martín Rodríguez, de 60 años, recién pudo liberarse de las ataduras con que lo redujeron los asaltantes pasadas las 11 de la mañana y horas después declaró a LT10 Radio Universidad (cuyos estudios están en la misma manzana que la Facultad y el Rectorado) que el asalto fue protagonizado por al menos tres individuos encapuchados que portaban armas de fuego. "Me tomaron de rehén a punta de pistola mientras efectuaba una recorrida de vigilancia alrededor de las 8 de la mañana", explicó el hombre.
Víctima de una gauchada
Junto con el vigilador también fue reducido "un vecino que me había traído a trabajar porque yo no tenía plata para el colectivo y se encontraba circunstancialmente conmigo", relató el guardia, quien dijo haber escuchado a los autores del atraco comentar que "habían permanecido desde el sábado dentro de la Facultad de Derecho".
En los patios de dicha casa de altos estudios se había llevado a cabo anteanoche la fiesta de despedida de año, de la que habían participado autoridades, profesores y alumnos. Todo hace presumir que los ladrones aguardaron que los participantes de la referida celebración se retiraran del lugar, cerca de las 7 del sábado, para entonces sí consumar el golpe.
Según el relato del guardia, los atracadores "rompieron todo en las oficinas del rector y del tesorero" y si bien dijo que no fue golpeado, consignó al relatar la odisea de tres horas que le toco vivir que "me amenazaban permanentemente para que me asuste y me ataron las piernas y las manos, además de amordazarme. Así me tuvieron desde las 8 hasta las 11".
Hasta anoche se desconocía el paradero de los autores del atraco, quienes lograron darse a la fuga sin dejar pistas, al tiempo que las autoridades de la UNL habían denunciado el faltante de una videograbadora, remeras con la inscripción de la universidad y otros elementos robados de las vitrinas de la planta baja de edificio universitario.