El presidente Eduardo Duhalde resolverá hoy sobre la situación de Aldo Pignanelli, quien presentó la semana pasada su renuncia al Banco Central (BCRA) por diferencias con el ministro de Economía, Roberto Lavagna. Aunque el mandatario no adelantó si le aceptará la renuncia, ya comenzaron a circular nombres de posibles reemplazantes del titular del organismo monetario.
El presidente, quien pasó un día de descanso en la localidad cordillerana de Villa La Angostura, al sur de Neuquén, dijo que el asunto "podría tener una definición mañana (por hoy)". El primer mandatario señaló que "aún no hay decisión tomada respecto a la situación del presidente del Banco Central".
Duhalde llegó a la villa neuquina el viernes último, para clausurar las primeras Jornadas de Regionalización y tanto sábado como ayer dedicó tiempo a la pesca en el sur argentino.
En tanto, el ministro de la Producción, Aníbal Fernández, le restó importancia al tema y aseguró que "no es tan grave" si se va el jefe del Central. "El presidente a esta cuestión le da un valor relativo", dijo.
El funcionario, uno de los de mayor confianza del presidente, señaló que al jefe de Estado "no lo veo apurado ni loco como para tomar una decisión de estas características, si tuviera que tomarla".
"La discusión parece un culebrón centroamericano, pero lo cierto es que es un tema entre técnicos que defienden sus ideas. Si Lavagna o Pignanelli las tienen, las tienen que defender, y el que toma la decisión final es el presidente", dijo el ministro.
Duhalde dijo que tomó conocimiento de lo sucedido con Pignanelli mientras se encontraba de viaje en Brasilia en la Cumbre del Mercosur, hecho que no era esperado por parte de titular del Poder Ejecutivo.
Sin embargo, será el propio mandatario, quien tras un día de descanso en Villa La Angostura deberá tomar contacto con el titular del Banco Central y adoptar una decisión al respecto.
Previamente, fue Duhalde quien manifestó que desconocer los motivos que llevarían a Pignanelli a dejar el Banco Central y aseguró "no tener nada pensado" respecto a quien podría ser el eventual reemplazante al frente de la autoridad monetaria.
"Desconozco los motivos de su intención de renunciar", fue la contestación dada por Duhalde cuando se le consultó sobre este hecho.
La presentación de la renuncia de Pignanelli cayó como un balde de agua fría en el seno de la Casa Rosada, un trámite que fue recibido en lo formal por el propio jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof el pasado jueves, mientras el presidente se encontraba de visita en Brasil.
El escándalo dividió a los miembros del gabinete, lo que se puso en evidencia el mismo jueves, cuando los funcionarios más cercanos al presidente Duhalde no acertaban a confirmar o desmentir la versión de la renuncia. Mientras Fernández y el secretario general de la Presidencia, José Pampuro, la dieron por hecho, desde la Jefatura de Gabinete lo negaron hasta último momento.
Lo cierto es que Pignanelli será recibido hoy por el presidente Duhalde, quien escuchara las razones del funcionario para alejarse del directorio del organismo contralor del sistema financiero.
En rigor, la situación es bastante conocida: Pignanelli no oculta su enfrentamiento con el ministro de Economía, Roberto Lavagna.
Los entredichos entre ambos funcionarios no son nuevos, ya que las primeras escaramuzas comenzaron a partir del arribo de Pignanelli al BCRA, y la posición de abrir meses atrás definitivamente el corralito.
Más allá de las versiones de renuncia, desde la Jefatura de Gabinete se vieron obligados a hacer declaraciones respecto a la continuidad de la "estabilidad" en el valor del dólar estadounidense y la necesidad de que el BCRA mantenga su política en materia de reservas.
Estas cuestiones llevaron en los últimos días a que se multiplicaran las reuniones para analizar estas cuestiones, algo que llevó a Pignanelli y al actual superintendente de Entidades Financieras, Jorge Levy, a mantener interminables contactos con los funcionarios de la Casa Rosada.
Los candidatos
Pero la victoria de Lavagna frente a Pignanelli no sería completa. El riñón duhaldista no quiere que la figura del ministro de Economía se acreciente aún más tras la salida del titular del Banco Central. Para esto, el primero en el escalafón de candidatos se encuentra Jorge Levy, el hombre de Duhalde en el ente contralor.
El ministro de Economía no oculta demasiado sus deseos se colocar en el cargo Félix Camarasa, director del Banco Central que hace las veces de operador de Lavagna hacia el interior del BCRA en las disputas sobre las políticas monetarias a implementar.
De todas formas, ninguno de los candidatos al igual que Pignanelli parecerían contar con el plafón intelectual y pedigree suficiente para conducir un organismo que debería ser independiente de las visicitudades del gobierno nacional de turno.
Entre las últimas peleas entre Lavagna y Pignanelli se encontraría la decisión de este último de puentear al Banco Central el borrador de la carta de intención que hoy estaría elevando el Ministerio de Economía a las autoridades del Fondo Monetario Internacional (FMI) para intentar destrabar por enésima vez un acuerdo que, como a comienzos de 2002, dista de estar a un paso de firmarse en el corto plazo.
La Ciudad
