Las Leonas Campeonas

Para papá Aicega fue "el premio al sacrificio del grupo"

Mario Candioti / La Capital

Es por personalidad una de las jugadoras más importantes del grupo, dentro y fuera de la cancha. Su juego y su figura resaltan estéticamente dentro y fuera de la cancha también. Su aparición como conductora de programas de televisión -de hockey, obviamente- le aseguraron un perfil alto. Aunque para su padre, Carlos, Magdalena Aicega sigue siendo una piba sencilla.
"Es una chica sencilla, muy sentimental y cariñosa. Es como dijo Soledad García de ella: «¿Quién se puede pelear con Magui?» Es una chica muy dulce pero con una personalidad que se nota a simple vista. Estamos muy orgullosas de ella", destaca con el lógico orgullo de padre.
El título conlleva para Magdalena un sabor especial, puesto que además le permitió dejar atrás la final del Mundial que perdió en el 94 ante el poderoso equipo de Australia, en Irlanda. Es que Aicega es una de las 4 sobrevivientes de aquellas leonas, junto a la capitana Karina Masotta, Vanina Oneto y María Paz Ferrari. Este equipo también había sufrido la desazón en los Juegos Olímpicos de Sydney, cuando cayó en el partido decisivo por la medalla de oro ante el mismo rival.
Al preguntársele cómo había vivido la final ante Holanda, el padre de la hermosa leona comenta que "fue muy íntimo, como de costumbre. Estábamos nerviosos y en algún momento temimos por el arbitraje, pero después quedó en claro que Dios no quiere cosas sucias. Creo que la actuación del equipo fue brillante. En todo esto tiene que ver el nivel de las jugadoras y el trabajo que ha hecho Cachito Vigil, mechando gente de 21 y 31 años y haciendo un producto que se ve a simple vista. A medida que iban pasando los partidos se veía que el nivel de juego era muy parejo, pero siempre allá arriba. Este es el premio al sacrificio de todo un grupo que trabajó durante mucho tiempo, con seriedad y objetivos claros".
La defensora de Belgrano Athletic tiene otro motivo para estar contenta. Su hermano mayor, Tomás, bautizó a su hijo con el nombre de León. El mejor homenaje que podría haber recibido la campeona del mundo.

Magdalena Aicega es una leona de muchas batallas.