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Doble apellido

En una época de por sí complicada, los trámites burocráticos provocan incomodidades y pérdidas de tiempo cuantiosas. Pero los funcionarios políticos parecen desconocer los problemas de la población, y la Defensoría del Pueblo de Santa Fe presentó un proyecto de ley por el cual se obligará a los ciudadanos a llevar doble apellido, agregando el materno después del paterno. Esta propuesta, en sí misma absurda y anacrónica, de concretarse traerá aparejados incontables inconvenientes burocráticos, confusiones, informaciones sumarias, rectificaciones y demás trámites interminables, con general perjuicio. La idea no tiene justificación válida, salvo la presión que ejerce algún feminismo extremo, alejado de toda razonabilidad. Lástima que esa Defensoría del Pueblo, en vez de dedicarse a defender a la población, pierda el tiempo en proyectos demagógicos que sólo pueden servir para crear más problemas.
Roque A. Sanguinetti