cartas

Un millar de firmas

La instalación de cámaras de gas y camiones de la muerte concebida por el intendente y los concejales de Comodoro Rivadavia como "la solución final" contra los perros sin hogar, fue ampliamente repudiada por nuestros conciudadanos. Rosarinos, amantes de la vida, se acercaron presurosos con el deseo de apoyar con su firma el rechazo generalizado del país al genocidio con monóxido de carbono de nuestros fieles e infatigables compañeros: los perros. Un millar de personas se pronunció en contra de este proyecto que nos retrotrae a épocas de la Alemania nazi. Dos mesas de trabajo instaladas en la peatonal Córdoba y Mitre y el trabajo mancomunado con clínicas veterinarias fueron suficientes para vehiculizar los anhelos de los pobladores de nuestra ciudad que se pronunciaron abiertamente por un ¡Sí a la vida! ¡No a la muerte por asfixia en cámaras de gas! A las entidades defensoras de los derechos de los animales sólo le queda reconocer públicamente a través de La Capital a los rosarinos que tomaron un rol activo en el repudio a los "camiones de la muerte". La majestuosa región chubutense donde priman las bellezas y las riquezas naturales debería avanzar hacia un futuro promisorio donde todos los seres fueran concebidos como eslabones de una cadena, donde los principios ecológicos del nuevo milenio se convirtieran en un baluarte digno de respeto. Este es el mensaje que Rosario quiere manifestar con sus firmas.
Sara Andrasnik