Un relevamiento realizado por la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) sobre la transferencia de fondos al exterior durante el año pasado, previo a la instauración del corralito, determinó que unas 1.500 personas sacaron alrededor de 3.000 millones de dólares a través de transferencias bancarias. En la lista figuran buena parte de los grandes holdings del país pero también tiene un capítulo santafesino ya que integran la nómina el actual ministro de Hacienda de la provincia, José María Candioti, quien por entonces se desempeñaba en la actividad privada, con más de un millón de dólares, y el empresario rosarino Roberto Paladini, con una cifra que supera los 7 millones en moneda estadounidense. La información, difundida por el periodista porteño Roberto Navarro en su programa "El Destape" de la señal P&E, indica que la Afip encaró una investigación en base a información del dinero que salió de los bancos argentinos hacia el exterior desde enero a diciembre de 2001. Durante este trabajo, el organismo fiscalizador cruzó 420 casos de transferencia de divisas y detectó irregularidades en 200 de ellos. Esto indica que no todos los fondos que salieron de la Argentina durante ese período fueron declarados legalmente. "Se trata de dinero que salió por los bancos, no de divisas que fueron necesariamente declaradas al fisco", explicó Navarro, quien reveló que la Afip comprobó muchas anomalías en el trabajo de cruzamiento de información. El periodista también indicó que los 3.000 millones "empezaron a fugarse a principios del año pasado", aunque hizo la salvedad de que esta metodología de colocación de divisas en el exterior es propia de muchos argentinos, "que tienen alrededor de 150 mil millones de dólares fuera del país", una cifra que "supera el Producto Bruto Interno (PBI) y la deuda pública". La lista de los que sacaron sus divisas del país, y que ayer revolvió el ambiente local a partir de su difusión en distintos medios radiales, está conformada por 1.500 personas, entre las que se encuentran fundamentalmente empresarios, economistas (algunos de los cuales defendieron la salud de la convertibilidad hasta ultimo momento, como Daniel Marx), banqueros e incluso periodistas. Entre los nombres que figuran están los de la familia Acevedo, dueños de la siderúrgica Acindar, que sacó 36 millones de dólares; familia Frávega (36 millones), el conocido titular de Irsa, Eduardo Elztain (4 millones), Amalia Fortabat (2,7 millones) y la familia Escasany, ex titulares del Banco Galicia (6,3 millones). Pero también está integrada por nombres muy conocidos en la ciudad y la provincia como la familia Paladini, que habría transferido al exterior más de 11 millones de dólares, de los cuales 7.232.000 corresponden a Roberto Oscar Paladini. actual director del frigorífico homónimo, presidente del Foro Regional Rosario y de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe). El resto corresponde a Juan Pablo Paladini (2.387.000) y Rodolfo Paladini (2.127.000). También figuran en la nómina el actual ministro de Hacienda del gobierno de Carlos Reutemann, José María Candioti, quien en la lista de la Afip figura con un giro al exterior de 1.082.327 dólares en dos transferencias realizadas hacia bancos extranjeros. Como se trata de traspasos efectuados durante el 2001, la operatoria realizada por Candioti fue realizada antes de asumir como presidente del directorio del Nuevo Banco de Santa Fe el 26 de abril de este año y como ministro de Hacienda el 22 de agosto pasado. Y fue después de su participación como presidente del oficial Banco de Inversión y Comercio, cargó que dejó en el 2000. Según explicó Navarro a La Capital, este relevamiento y cruzamiento de datos que realizó la Afip se enmarca en las investigaciones que se encararon desde el Congreso para determinar el origen de la salida de capitales que terminó por erosionar la base de la convertibilidad y derivó en el colapso económico de diciembre. En rigor, el objetivo final de estos procesos apunta a desentrañar las razones por la cuales colapsó el sistema financiero argentino a finales del año pasado y que derivó en el corralito y en la caída del gobierno del ex presidente Fernando de la Rúa. Si bien la información que recolectó la Afip a priori no determina ilegalidad en los procedimientos, ya que se trata de una operatoria de transferencia bancaria de fondos de particulares permitida en los tiempos en que no había control de capitales (realizable incluso mediante una simple transferencia entre filiales de un mismo banco), sí contribuye a rastrear el comportamiento de los distintos sectores económicos y sociales en medio de la crisis, y a asignar las responsabilidades históricas correspondientes. Las cifras varían según los analistas pero se estima que la salida de capitales de Argentina llegó el último año y medio a superar los 20 mil millones de dólares. Por otro lado, también es cierto que el trabajo de la Afip busca descubrir si hubo maniobras de evasión o elusión impositiva en esas operaciones. Sucede que el fisco detectó irregularidades en 200 de los 420 casos cruzados. En el caso de que se trate de hombres que actualmente participan del gobierno, que en muchos casos hacen permanente profesión de fe a favor del ajuste, la incompatibilidad legal estaría en todo caso si el dinero no hubiera sido incluido en la declaración jurada.
| |