Duhalde no les quita privilegios a los jueces

El presidente Eduardo Duhalde vetó casi en su totalidad la ley de eliminación de jubilaciones de privilegio, por lo que restituyó la vigencia de los beneficios para los jueces de la Corte Suprema de Justicia, los diplomáticos y los obispos de la Iglesia Católica.
Duhalde sólo confirmó la derogación de las jubilaciones especiales para legisladores nacionales y funcionarios del Ejecutivo -ministros, secretarios y subsecretarios-, aunque decidió mantener la asignación vitalicia que cobran ex presidentes y ex vicepresidentes. El decreto 2.322, publicado ayer en el Boletín Oficial con las firmas del presidente y los miembros del gabinete nacional, observó siete de los ocho artículos de la ley sancionada por el Congreso el pasado 23 de octubre.
La ley 25.668 había dejado sin efecto no sólo los regímenes jubilatorios especiales del sector político, sino también los que benefician a los funcionarios del Servicio Exterior, a los jueces de la Corte Suprema de Justicia y a los obispos mayores de 75 años.
El Ejecutivo argumentó los vetos en la "litigiosidad" que podría producirse por la aplicación de la norma y que afectaría las arcas fiscales, según el texto del decreto que lleva la firma presidencial.
El gobierno resaltó, además, que "la voluntad popular expresada, especialmente, a través de la Mesa del Diálogo Argentino dirigió sus demandas a la eliminación de las jubilaciones diferenciales de los funcionarios políticos de los poderes Legislativo y Ejecutivo".