SILVIA CARAFA
La Capital
Sancti Spíritu. - La Subsecretaría de Comunas dispuso la inhabilitación del presidente de la comisión comunal, Luis Coccoz, y del tesorero, Juan Carlos Solari, para el ejercicio de sus cargos. Ambos deberán cesar en sus funciones y, de lo contrario, se los intimará mediante una resolución. Hasta el momento Coccoz, quien rechazó las imputaciones, no acató la decisión y revalidó su puesto por medio de una votación dentro de la comisión. Pero esta falta de cumplimiento podría dar lugar a la intervención del distrito, cosa que ya reclama la minoría política local.
La repartición provincial ordenó una inspección legal y contable en la comuna de Sancti Spíritu a raíz de la denuncia de la minoría por malversación de fondos, incumplimiento de los deberes de funcionario público e incompatibilidad del presidente, vicepresidente y tesorero de la comisión comunal para ejercer sus cargos. La investigación recolectó elementos que corroboraron las denuncias realizadas. Además, y en conformidad a la ley de comunas 2.439, se impuso de la situación a la Fiscalía de Rufino.
La Asesoría Jurídica de la Subsecretaría de Comunas consideró que Coccoz y Solari se encontraban en situación de incompatibilidad para sus cargos, por estar procesados por peculado según resolución de la Cámara de Apelaciones en lo Penal, en junio de 1999; además, el Juzgado en lo Penal de Instrucción dictó la prisión preventiva con libertad condicional.
Una compra peculiar
La situación se remonta a 1996, cuando el miembro de la comisión comunal Edgardo Lanza denunció ante la fiscal Graciela Mastrocessare lo que consideraba una serie de irregularidades cometidas por la administración local. Entre ellas figuraba la compra de un terreno fiscal por parte del propio Coccoz y de Solari. La transacción se habría realizado a un precio módico para que no se interpretara como una donación.
El predio en cuestión está en el sitio que entonces se promovía como futuro parque industrial. La compra tenía como objetivo montar un emprendimiento y se habría hecho sin el conocimiento del resto de la comisión. La sorpresa llegó cuando trascendió que las personas físicas de la empresa Sancti Spíritu eran Coccoz, Solari y otro socio venadense. Pocos días después el terreno fue escriturado a nombre del padre del tesorero.
A pesar de la disidencia de la minoría, el proyecto siguió adelante y allí se construyó una fábrica de dulce de leche que funcionó durante los primeros años y luego se alquiló para producir queso. Por este y otros hechos, el juez Perassi dictó el procesamiento y la prisión preventiva de Coccoz por peculado, falta de cumplimiento de los deberes de funcionario público y abuso de autoridad. En 2000 la Cámara Penal confirmó el procesamiento, trámite que espera la decisión del juez de Sentencia Fernando Vidal.
La minoría reclamó en dos oportunidades, ante la provincia que Coccoz no continuara al frente de la comuna teniendo prisión preventiva, ya que la ley de comunas lo prohíbe expresamente. Ahora reclama la urgente intervención a la comuna y el llamado a elecciones para elegir un nuevo presidente comunal.