Además de devastada, la familia de la mujer fallecida estaba sorprendida. La madre de Graciela Mesa dijo que la pareja "era muy unida y ambos se querían muchísimo". Ramón Frutos trabajaba como encargado del sector pastas y panadería en una sucursal del supermercado Coto. Graciela también perteneció a esa cadena, pero hace un tiempo había dejado su puesto con la intención de abrir junto a su compañero una verdulería sobre calle Mendoza. Ayer se supo que ambos eran oriundos de la provincia de Buenos Aires. También trascendió que Ramón era un aficionado a la caza y que tenía varias armas de fuego guardadas en su casa. "También coleccionaba cuchillos", agregó un vecino. La policía secuestró una escopeta de un caño, una carabina calibre 22 con mira telescópica, una pistola Bersa calibre 22 y la 6.35 que fue disparada a la mañana. Todas esas piezas, según dijo la policía, son de uso civil y contaban con la credencial de portación a nombre de Ramón. Las fuentes consultadas dijeron que fueron incautadas preventivamente "en resguardo ya que la casa había quedado deshabitada".
| |