Año CXXXVI
 Nº 49.666
Rosario,
lunes  18 de
noviembre de 2002
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Un hombre calcinado y apuñalado en su cama
Era cuidador del cementerio La Piedad. Sus vecinos advirtieron el fuego. Presumen que fue un crimen pasional

Uno de los cuidadores del cementerio La Piedad apareció incinerado en su casa de una barriada humilde a unas tres cuadras de 27 de Febrero y Circunvalación. El cuerpo carbonizado de la víctima, de unos 40 años, fue descubierto ayer a la madrugada, después de que vecinos llamaran a los bomberos al observar el humo que salía de la vivienda. Tras apagar el fuego, personal policial dedujo que la muerte no era resultado de un accidente: en el cadáver eran notables las marcas de varias puñaladas.
Daniel Ramón Ransiglio, de 40 años, vivía solo con sus dos perros. Sus vecinos no escucharon gritos ni vestigios de alguna pelea en la casa del custodio, a pesar de que algunos estaban levantados desde antes de las 6, la hora en que advirtieron el fuego y llamaron a los bomberos. Tampoco escucharon ladrar a los guardianes de la casa, dos mastines fieles y feroces a los que nadie del barrio se atrevería a desafiar.
Fuentes policiales deslizaron que el crimen podría tener una arista pasional. Ransiglio mantenía buenas relaciones con los vecinos de su cuadra. Tampoco tenía nada para que le robaran: su vivienda había sido saqueada hace unos 20 días.
El único motivo de disputa aparente lo tenía con una jovencita de 17 años con quien estaba de novio y que poco tiempo atrás lo había hecho pasar unos días en prisión, acusado de golpes y maltrato. La pareja protagonizó algunas disputas violentas, con corridas en el barrio, que transformaron sus rencillas en asunto público entre los vecinos. Después vinieron la denuncia y el encierro en la comisaría 19ª, que ayer intervino en la investigación a partir del crimen junto a la Brigada de Homicidios. Ni los vecinos ni la policía relacionaron directamente a la mujer con el crimen.
Los vecinos señalaron que después de haber sufrido el robo en su casa, Ransiglio sólo iba a la casa a dormir. Lo habían visto poco las últimas semanas. Estaban sorprendidos por el crimen. "Es un barrio bravo, pero por los robos", coincidían.
A las 6 de la mañana de ayer, el humo que salía de la casa concentró a algunos vecinos del hombre, que intentaron abrir la puerta a golpes y avisaron a los bomberos. La dotación halló el cuerpo de Ransiglio carbonizado, pero al revisarlo descubrieron que además tenía varias puñaladas en el torso.



Daniel Ransiglio vivía solo en su casa de zona oeste.
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