Año CXXXVI
 Nº 49.666
Rosario,
lunes  18 de
noviembre de 2002
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John Kennedy estaba más enfermo de lo que se sabía
Según registros médicos, tenía que abarrotarse de píldoras para aliviar los dolores por varios males

El ex presidente estadounidense John Fitzgerald Kennedy sufría enfermedades que lo llevaban a abarrotarse de píldoras y medicamentos para aliviar el dolor, según muestran sus registros médicos, dijo un informe publicado por el New York Times.
Kennedy sufría problemas digestivos y la enfermedad de Addison, que provoca fatiga, calambres y dolores musculares, y en algunos casos nauseas y vómitos recurrentes.
El presidente se abarrotaba de drogas para el dolor, para la ansiedad, estimulantes y somníferos, además de hormonas para mantenerse despierto, en grandísimas dosis en momentos de estrés.
La noticia tiene origen en el trabajo de un historiador independiente, Robert Dallek, que examinó los detalles de una serie de partes médicos con la ayuda de especialistas.
Dallek escribió una biografía del mandatario que se publicará el año próximo con el título "Una vida inconclusa: John F. Kennedy, 1917-1963". La obra se basa en documentos originales y es fruto de dos años de investigación, que llevó a cabo con el médico Jeffrey A. Kelman. Ambos consiguieron información médica privada que, aunque utilizada en el estudio, no están autorizados a publicar.
Hasta hoy, siempre se pensó que Kennedy había gozado de una óptima salud, con excepción de su conocido mal de espalda. La falta de salud del presidente fue ocultada, en un país donde se la considera como un problema de interés público.
Dallek sostiene empero que en ningún momento, incluso en los de más dificultad, Kennedy parece haber perdido el control de la situación.
Entre las causas de sus dolores y enfermedades, el libro desmiente lo que siempre se creyó, que Kennedy sufría de mal de espalda debido a una herida de la Segunda Guerra Mundial. Dallek sostiene que ya había comenzado a tener problemas en los años 30, tras haber tomado esteroides para resolver problemas intestinales. (Télam-SNI)


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