Empleados de Cimetal quieren asumir la firma

La sindicatura de la quiebra intenta una venta directa de la fábrica de ruedas. La jueza dio plazo hasta el 22

Los operarios de la quebrada fábrica de ruedas Cimetal reclamaron el traspaso de la compañía a manos de una cooperativa integrada por ellos mismos, tras varios intentos fallidos de licitación judicial. Por su parte, la sindicatura de la quiebra está buscando un vendedor antes del próximo 22 de noviembre, fecha en que vence la prórroga para una venta directa.
La fábrica se encuentra en funcionamiento y mantiene un contrato con la terminal local de Volkswagen hasta el 20 de diciembre con el compromiso de abastecer unas 7.000 ruedas por mes, si bien la capacidad instalada de la planta alcanza para producir 200 mil unidades mensuales. En la planta trabajan actualmente 83 empleados, entre operarios, administración y personal de dirección.
Los empleados de la fábrica lanzaron un proyecto para crear una cooperativa de trabajadores, ya que consideran que es el único mecanismo que permitirá la continuidad de los puestos laborales. Fundamentan su posición en el "fracaso" de la sindicatura en el saneamiento de la empresa, dado que aún en el proceso de quiebra la firma pierde a razón de un dólar por rueda producida. También cuestionan la incapacidad del administrador judicial para lograr interesar a potenciales compradores.
Uno de los integrantes de la sindicatura, Daniel Ponce, reconoció ayer que no existen oferentes, pero dijo que los "empleados son conscientes de que lo mejor para su futuro es que aparezca un comprador". La sindicatura tiene la intención de prorrogar hasta mediados de 2003 la administración de la quiebra, en el caso de que no se consiga un comprador antes del próximo 22.
También tercia en las discusiones otro grupo de empleados, ligados a la administración de Cimetal, que también pelea por la creación de una cooperativa de trabajadores. Para completar el complicado escenario, está la disputa entre los acreedores, ex propietarios incluidos, que pujan por recuperar algo de la quiebra.
El proceso de venta directa se abrió después de que quedaran desiertos los dos llamados para el remate de la empresa. La jueza a cargo de la quiebra, Liliana Giorgetti, extendió hasta el viernes de la semana próxima el plazo para la venta directa de la firma, dado que los edictos judiciales no habían sido publicados oportunamente.
A lo largo del último año y medio estuvieron interesados en la compra de la fábrica algunos autopartistas de Buenos Aires y Córdoba. En primera instancia, y que parecía próximo a concretar la compra fue el grupo Bacanelli, que se habría en principio alejado después de que decayera el interés de una compañía italiana por participar en el negocio. En los últimos meses, el principal interesado en adquirir la fábrica de ruedas fue el grupo Taselli. Sin embargo, fuentes judiciales dijeron que esas negociaciones se enfriaron.
De no aparecer un comprador, la jueza Giorgetti deberá definirse entre continuar con la administración a cargo de la sindicatura o dar lugar a una posible constitución de una cooperativa de trabajadores.