La UTN desarrolla una propuesta inclusiva que se apoya en las nuevas tecnologias

Un proyecto de la Tecnológica atiende a estudiantes con capacidades diferentes

Invitan a quienes se sintieron discriminados pos sus condiciones físicas a volver a estudiar

Marcela Isaías / La Capital

Hacer de la universidad un lugar de aprendizaje para todos es un objetivo que, desde hace dos años, convoca a un grupo de docentes de la Facultad Regional Rosario de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN). Desde entonces se reúnen a pensar, proyectar y desarrollar ideas par a atender a los estudiantes con capacidades diferentes. Pero básicamente lo que pretenden, afirman, es difundir en la sociedad que aquellos que por sentirse discriminados no pudieron empezar o seguir un estudio, sepan que en la UTN tienen su espacio para aprender.
  Según opina el director de este proyecto, enmarcado dentro del programa de incentivos del Ministerio de Educación de la Nación, José Luis Albano, "la universidad no está preparada para atender a los discapacitados". En su opinión hay mucho por hacer para revertir esta situación. "Esto surgió -recuerda- como una necesidad de dar respuestas a alumnos nuestros con capacidades disminuidas, pero con sus capacidades intelectuales intactas".
  Para darle forma a una propuesta evidentemente inclusiva, diseñaron un proyecto que atiende a la transformación didáctica y que apunta a trabajar con los docentes. "Es decir -explica Albano— que el docente sepa que tiene un alumno con visión disminuida, por ejemplo, o que tiene un alumno con problemas espásticos; porque hay profesores que no permitían poner un grabador en la clase y tal vez eso era fundamental para la atención del alumno".
  Esta transformación también apunta a los demás estudiantes, ya que se trata de integrarlos a colaborar puntualmente con las demandas que los estudiantes con capacidades disminuidas suelen demandar. La otra cara de esta transformación pasa por sumar el criterio de pedagogía cibernética, que hasta el momento la UTN sólo usaba para los estudiantes en general. Lo cual no es otra cuestión que sumar los beneficios de las nuevas tecnologías al mejoramiento del aprendizaje. "Tuve un alumno espástico en clase de dibujo que se tomaba doble ración de tranquilizante para poder usar el compás. Nadie quería —a nivel institucional- generar una resolución para que ese alumno utilizara otra herramienta, como la computadora para hacer el mismo trabajo. Por suerte esto se revirtió, el alumno hoy es ingeniero y trabaja", recuerda Albano.
  En otros niveles de escolaridad como la EGB y hasta el polimodal, la atención a lo que se conoce como necesidades educativas especiales está más incorporada, al menos hay un intento mayor de abrir este debate que en el ámbito universitario.
  Conocedores de esta situación y preocupados para que un derecho básico como lo es el de aprender sea igual para todos, este grupo de docentes de la UTN dirige este trabajo de investigación hacia otras reformas que consideran necesarias, como lo son las que competen al ambiente físico de estudio. "Debemos pensar en los baños, ascensores y hasta las rampas de ingreso", dicen al respecto.
  Entre los docentes que integran este proyecto, y que pertenecen a diferentes materias está Lilia Castelli, profesora de ingeniería y social. "Las mayores dificultades -comenta- persisten en la institución, porque los alumnos en general son solidarios con sus compañeros con necesidades". Con ella coincide otra profesora, María Florencia Santinelli que considera que "las vallas para aprender comienzan para estos chicos con dificultades cuando llegan a la universidad".
  Roque Maciarelli es docente de química, según opina "es necesario encarar un trabajo multidisciplinar y conjunto". Para el caso cita como ejemplo, la necesidad de adaptar el laboratorio para que nadie se quede sin trabajar en él. A este comentarios se suman los de Eduardo Amar, Paulino Gama y Sonia Feldamn, otros profesores integrantes del proyecto, que valoran de distintas maneras el proceso de integración de los alumnos con capacidades diferentes a la universidad.
  Hasta el 22 de noviembre la Facultad Regional Rosario inscribe al curso de nivelación (verano) para el ingreso 2003 a las carreras de ingeniería que allí se dictan. Para informes, dirigirse de lunes a viernes de 9 a 12 y de 17.30 a 20.30, en el departamento alumnos, planta baja, teléfono 4480102/2404, interno 125 y126, Zeballos 1341.