Luego de estar una semana prófugo, Martín Murgía, productor del programa televisivo de Mauro Viale, se entregó ayer a la Justicia y admitió que le dio el número telefónico de Pablo Echarri a uno de los presuntos secuestradores del padre del popular actor televisivo, pero aclaró que lo hizo a cambio de una "primicia" y creyendo que colaboraba con el esclarecimiento del caso.
Ahora, el joven quedó detenido y hoy, a las 10, será sometido a una rueda de reconocimiento en la que el propio Antonio Echarri, quien estuvo secuestrado durante una semana. Deberá establecer si lo vio durante los días que estuvo cautivo, según confirmó el juez federal a cargo momentáneamente de la causa, Arnoldo Corazza.
Ayer a la mañana, a primera hora, Martín Murgía, el joven productor de 19 años que estaba prófugo desde hace una semana sospechado de haber prestado colaboración en el secuestro de Echarri, se entregó a la Justicia.
El nombre del productor del programa de Mauro Viale apareció en la causa de la boca del detenido Germán Ferrand Luna, quien -para beneficiar su situación y establecer que sólo participó de una extorsión y no del secuestro- reveló que había conseguido el teléfono de Echarri a través del productor televisivo.
En la audiencia en la que prestó declaración indagatoria, el joven productor lloró ante el juez y reconoció haberse "equivocado" al darle el teléfono a uno de los imputados y no haber explicado esta circunstancia a la policía o a la Justicia, según indicaron fuentes judiciales.
Pero, al mismo tiempo, Murgía subrayó que "no hubo delito" en su proceder sino que sólo lo hizo a cambio de "algo así" como una primicia y creyendo que de esa forma colaboraba para liberar a Antonio Echarri, relató el abogado defensor del joven, Alejandro Vecchi.
Ahora, el juez resolvió enviarlo a una prisión y tiene diez días de plazo para resolver su situación procesal. Así, Murgía se convirtió ayer en el décimo detenido por el secuestro de Antonio Echarri, que tuvo lugar entre el 24 y el 31 de octubre pasado, cuando el vendedor de diarios fue secuestrado en su quiosco de Avellaneda y fue liberado por la policía en una vivienda de Lavallol. El abogado Vecchi, quien se hizo conocido por representar a la familia del periodista José Luis Cabezas en el proceso por su asesinato, es el defensor del productor y ante los medios salió a explicar cómo habían ocurrido los hechos, de acuerdo al relato del imputado. Según dijo, el martes 29 de octubre "todos estaban en vilo sobre el señor Echarri" y su cliente "había creído la posibilidad de conocer el paradero o estar cerca de conocer el paradero" del padre del actor.
Ese día, el joven productor le entregó el teléfono de los Echarri a Germán Ferrand Luna, quien -según reconoció- inmediatamente llamó a los Echarri para "mejicanear" a la verdadera banda de secuestradores y quedarse con los cerca de 200 mil pesos que se habían pactado por la liberación de la víctima. Esa misma noche del martes, Pablo Echarri dejó en un bolso la suma exigida en la zona de Congreso, situación que permitió luego seguir a los sospechosos y detenerlos.
"Murgía admite que se equivocó al darle el teléfono, pero para él no hubo delito", dijo Vecchi a los periodistas. También dijo que está "arrepentido por no haber dado la información a la Justicia o a la policía".
El letrado reveló que su cliente no tenía el número de Echarri y que se lo pidió "a una compañera", y añadió que fue uno de los imputados el que se comunicó con él para solicitarle ese dato. Vecchi aseguró también que, desde aquel momento, Murgía y el presunto secuestrador "se desconectaron". (DyN)
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La Ciudad
