Año CXXXV
 Nº 49.657
Rosario,
sábado  09 de
noviembre de 2002
Min 14º
Máx 22º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com






Huracán y San Lorenzo, un partido caliente

El partido entre Huracán y San Lorenzo que se jugará esta tarde -ver aparte- cambió su antesala de clásico barrial y pasó a estar rodeado de amenazas de venganza desde el 19 de diciembre de 1997, cuando barras bravas cuervos asesinaron al simpatizante quemero Ulises Fernández.
Faltaba casi media hora para el inicio del encuentro que iba a enfrentar a Huracán y San Lorenzo por la última fecha del torneo Apertura y todo parecía tranquilo en los alrededores del Nuevo Gasómetro, donde se iba a disputar el encuentro.
Solo parecía. En ese momento, un grupo de 40 salvajes del Ciclón que estaban en la confitería del polideportivo del club atacaron con armas blancas y de fuego a hinchas de Huracán que ingresaban por la Avenida Cruz, cerca de la intersección con la calle Charrúa.
La pelea cuerpo a cuerpo entre los integrantes de las dos rivalidades duró varios minutos antes de que la lenta intervención policial detuviera lo que podría haber sido una tragedia mayor.
La única víctima fatal fue Ulises Ernesto Fernández, de 24 años, quien ingresó al Hospital Penna y falleció por una herida de bala en el parietal y otra punzante en la sien.
Pese a los incidentes, el árbitro Horacio Elizondo, el mismo que dirigirá mañana, comenzó a jugar el partido, que solo llegó hasta los 21' del segundo tiempo con el resultado 0-0, cuando los simpatizantes de Huracán rompieron el alambrado, enterados de la muerte del Gordo Ulises.
El saldo de ese cruce, el más violento que se recuerde entre ambas parcialidades, fue de un muerto, seis heridos de gravedad y 150 detenidos.
Desde ese partido se disputaron otros siete, pero con una particularidad, los tres primeros se jugaron en cancha de Vélez Sarsfield y en horas de la tarde por cuestiones de seguridad.
El primero fue el 7 de junio de 1998 con victoria quemera por 2-1, el segundo fue victoria cuerva por 2-0 el 22 de noviembre del mismo año y el tercero (1 de junio de 1999) fue empate en uno.
Ni el año que pasaron en la B Nacional (junio 99 a junio 2000) hizo olvidar a los de Parque de los Patricios la muerte de Ulises, que siempre estuvo presente en sus cánticos de guerra.
De a poco, cuando las cosas retomaron cierta normalidad, ambos equipos volvieron a ser locales en sus respectivos estadios.
La desaparición, el pasado 4 de octubre, de una gran cantidad de banderas, por el que se sospecha de hinchas de Huracán, volvió a encender la mecha.
El próximo sábado se disputará una nueva edición de este duelo barrial, lleno de gloriosa historia por ambas partes, que se resiste a perder la pulseada ante la violencia. (Télam)


Diario La Capital todos los derechos reservados