cartas

Un sentido agradecimiento

Al estar recuperada de una fractura de pelvis por un accidente automovilístico me siento obligada a agradecer a las personas que han estado al lado mío en este duro trance. En primer lugar al médico traumatólogo Oscar Pianovi, que con sus conocimientos, su voluntad y su mejor buen humor me hizo salir adelante. A la kinesióloga Alicia Arinci, a las personas que encontré en la clínica Cot (de ortopedia y traumatología) de la mano del kinesiólogo Pablo Milinkonsky, sus colaboradores Martín Almirón, Pablo González del Cerro, Mariano Baudaña y a todos los que pertenecen a dicha institución. Que Dios los ilumine cada día por la labor que realizan y hacen que el dolor sea más llevadero. Mi extenso agradecimiento.
Viviana Calore