Murió Emilio, el bebé trasplantado de hígado que era de Venado Tuerto

Falleció Emilio Trono, el bebé que fue trasplantado en septiembre último después de una larga espera para recibir la donación de un hígado. Según explicaron los médicos, el órgano "no fue asimilado" y provocó "una insuficiencia" que terminó con la vida del paciente. El cuerpo fue retirado ayer a la madrugada del hospital Italiano de Capital Federal, donde estaba internado desde mediados de año, por sus familiares y fue trasladado para su sepelio a Venado Tuerto, donde vive la familia.
Emilio murió pasadas las cuatro de la madrugada de ayer ya que el rechazo producido en el hígado trasplantado derivó en una complicación en los restantes órganos del bebé, que tenía ocho meses.
Incluso, el pequeño nunca pudo abandonar el hospital en el que había sido intervenido hace dos meses en razón de que nunca hubo una aceptación total del órgano injertado.
El trasplante de hígado se hizo el 5 de septiembre último, luego de una campaña de concientización que desde los medios de comunicación posibilitó la aparición de un donante cadavérico. En esa oportunidad, se había advertido que la aceptación del órgano por parte de Emilio iba a ser básicamente el factor que decidiría la evolución y recuperación del bebé.
El paciente ya había recibido un hígado de un pariente directo, el que no había sido asimilado, lo que incrementaba el riesgo para la segunda intervención. No obstante, la aparición de un nuevo donante había renovado las esperanzas.
Emilio era hijo de Noemí y Mario Trono, un matrimonio oriundo de Venado Tuerto, comunidad del sur santafesino que ayer recibió consternada la noticia que en los últimos días se esperaba de un momento a otro.