Apertura 2002

Arsenal lo tenía pero vino la lluvia

Jugaba mejor pero Banfield reaccionó con el temporal, que puso la cancha difícil

Arsenal, que sigue sorprendiendo con su destacada campaña, fue mejor que Banfield hasta que se desató un temporal de viento y lluvia que lo sumió en cierta confusión y no pudo quebrar el empate en un gol que coronó un intenso pero discreto partido.
El encuentro tuvo lugar en el estadio de Banfield, en el sur bonaerense, ante unos 10 mil espectadores, gran mayoría del local, que venían muy embalados por dos triunfos consecutivos, el primero histórico y consagratorio sobre River 5-0 y en la fecha pasada de visitante 3-2 ante Huracán.
Pero Arsenal volvió a recurrir a la astucia de su planteo de contraataque que tan inteligentemente suele urdir su entrenador Jorge Burruchaga. Y con eso y no mucho más fue algo mejor que Banfield, en un primer tiempo que se fue sin que se abriera el marcador.
Tanto que Luchetti fue la gran figura, especialmente con dos enormes atajadas sobre Piersimone, a los 7 minutos ante un cabezazo a quemarropa y a los 12 emergiendo airoso en un duelo personal.
La respuesta ofensiva de Banfield siempre estuvo a cargo del muy mejorado y entonado Colautti, con un cabezazo apenas desviado a los 32 minutos.
Cuando no se había completado el primer minuto del complemento, Arsenal tuvo su justo premio y con un golazo de su mejor jugador, Silvio González, quien se mandó en diagonal y definió con perfecto derechazo.
Arsenal tenía todo a su favor, pero un preciso pase al claro de Moreno y Fabianesi encontró libre de marcas a Colautti, quien ahora sí pudo batir a Luchetti. Banfield todavía no era merecedor del empate. Enseguida, el palo izquierdo salvó al local y segundos después se desató un fuerte temporal de viento y lluvia.
Esa circunstancia climática tornó el desarrollo muy impreciso y deslucido. Y a río revuelto... Banfield resultó más apto para trasladarse en un terreno resbaladizo y a base de mucho empuje y un montón de centros aéreos terminó arrinconando a Arsenal y a la postre justiticando la igualdad.
En definitiva, ambos también esgrimieron argumentos como para que la permanencia en primera no sea complicada. Sumando así, la evitarán sin mayores problemas. (DyN)

El objeto del deseo es la pelota y Cervera la ganará.