| | Operarios de Fader quieren una cooperativa
| Los 300 operarios de la empresa de refrigeración Fader no quieren que el proceso de quiebra en el que está inmersa la empresa desde 1998 termine en un desguace de la planta y en la venta de lotes individuales de las máquinas. Amparados en un artículo nuevo de la ley de quiebras, presentaron en el Concejo Municipal un pedido para hacer factible la futura expropiación del predio donde funcionó la industria. "Si bien el Concejo no puede resolver la gestión, la estrategia apunta a que el cuerpo solicite al gobierno provincial, por medio de la Legislatura, el pedido de expropiación", explicó la concejal Analía Carrió (PPS) quien recibió a los operarios. De esta forma podría pararse el futuro remate sin base y la liquidación de maquinarias. El juzgado que atiende la causa está en la ciudad de Santa Fe y, según la ley, podría frenar la liquidación l menos por 20 meses, que es lo que demora una expropiación efectiva. La empresa dedicada a la fabricación de compresores y refrigeración en general está en quiebra desde 1998 y se ofertó en reiteradas oportunidades en licitación pública para su venta hasta el 2001 pero no se concretaron operaciones y esa instancia fue declarada desierta. El síndico de la quiebra solicitó en su momento al juzgado que permita la venta directa tanto de la planta de Rosario, de Ovidio Lagos y Acevedo, como de la planta de Fader en Santo Tomé. No obstante, desde el estudio que atiende los créditos laborales de los operarios se evalúa otra estrategia. "Muchas empresas tienen la posibilidad de seguir funcionando por medio de la figura de quiebra con continuidad, permitida por un artículo de la ley de quiebras, y es allí donde apuntamos", explicó Carlos Farías, abogado de los operarios. El abogado agregó que "la posibilidad de crear cooperativas es la nueva forma de reactivación". Le empresa llegó a tener 1.800 operarios en sus dos plantas y exportó productos a toda América latina. "En una quiebra como ésta nadie cobra un peso", dice el letrado para acotar que "los obreros tienen privilegios de cobro sobre la venta de las máquinas pero si se venden como chatarra el precio es casi irrisorio". La esperanza de trabajar es lo que sostiene esta pelea "en la continuidad no sólo se preserva el trabajo sino que se apuesta a la producción. La idea es que los créditos laborales se traduzcan en trabajo", dicen los operarios. De la cantidad de operarios hoy sólo están detrás de esta estrategia unos 300 y pedirán al juzgado santafesino que, de aceptarse la propuesta, una comisión integrada por ellos, el juzgado y docentes de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Rosario evalúe el potencial productivo de la industria En caso de que esto tenga una resolución favorable, Fader se sumaría a unas diez empresas de Rosario que ya están en esta situación.
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