Creyeron que estaba ebrio y lo dejaron morir

El oficial auxiliar Gustavo Romero y el subayudante Rafael Baley, ambos de una comisaría de la localidad de Avellaneda, fueron detenidos bajo la acusación de "abandono de persona seguido de muerte" en el marco de la causa que lleva adelante el juez de Instrucción de Reconquista, Enrique Müller, acerca de la muerte de Adilco Base.
Según trascendió, los policías habrían creído ebrio a Base cuando en realidad padecía una aneurisma cerebral y no lo atendieron debidamente. Base, quien se desempeñaba como mozo del comedor del camping de Avellaneda, falleció el domingo en el hospital de Reconquista víctima de esa afección en las arterias cerebrales.
Los voceros indicaron que el sábado el hombre salió del camping a bordo de su auto pero se descompuso en el camino y los policías que lo atendieron lo trasladaron hasta el frente de la comisaría porque, según dijeron, "al parecer estaba borracho". Allí lo dejaron en el interior del auto esperando "que se le pase la borrachera".
La esposa de Base, preocupada por la tardanza de su marido, preguntó en la comisaría y a los pocos minutos llegó al lugar, donde comprobó que su esposo estaba en mal estado de salud en su auto y lo llevó al hospital donde murió.