En coincidencia con el Día Mundial de la Osteoporosis se lanzó un programa nacional de prevención de la enfermedad, que tiene como centro de referencia al hospital Ramos Mejía de la ciudad de Buenos Aires, con la idea de disminuir la posibilidad de caídas y frenar la natural descalcificación que sufren los ancianos. Algunas de las medidas preventivas son colocar agarraderas en los baños, retirar las alfombras pequeñas en los hogares donde viven adultos mayores e invitarlos a caminar y a tomar sol todos los días. Las nuevas estrategias se aplicarán por una iniciativa de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
En cuanto a las medidas preventivas, el coordinador del centro de referencia, Eduardo Kerzberg, confirmó que en los relatos de los pacientes que sufrieron caídas y fracturas, "siempre aparece que después de tomar los ansiolíticos, se levantaron a orinar, no prendieron la luz, o no se pusieron los anteojos, tropezaron con la alfombra y se cayeron".
Diagnóstico simple
La osteoporosis se produce por la pérdida de densidad en los huesos y se pone en evidencia mediante un diagnóstico simple, efectuado con un análisis clínico y un densiómetro. También se la sospecha cuando la persona comenzó a encorvarse y perdió unos centímetros de estatura.
Algunos de los factores que influyen en su aparición son las dietas con carencia prolongada de calcio y proteínas, niveles bajos de estrógenos después de la menopausia, disminución de la actividad, tabaquismo y deficiencia vitamínica (sobre todo vitamina C). Los primeros síntomas son dolor de espalda, columna deformada y fracturas, especialmente en cadera o brazo.