Otro hombre murió presuntamente ahogado en su vivienda de Punta Lara, partido de Ensenada, con lo que se convirtió en el segundo caso fatal en poco más de 24 horas por el temporal en esa zona, mientras se registraban más de 5.200 evacuados en las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos a causa de las inundaciones.
En el territorio bonaerense, la situación se agravó ayer al mediodía en Mar del Plata e inmediaciones, a raíz del desborde de arroyos, por lo cual hubo que evacuar a unas 500 personas. En tanto, en Quilmes se registraron 440 evacuados, en Berazategui, 120; en Ayacucho, 25, y en el distrito de Ensenada, 125. En este último lugar, otro hombre fue encontrado ayer presuntamente ahogado al inundarse su vivienda situada en la ribera del Río de la Plata. Fuentes de la Dirección de Defensa Civil confirmaron que se trata de "un hombre mayor, de apellido Sestini", quien se cree que pereció en su casa de la villa Rubencito, mientras dormía. Anteayer, en la misma localidad se había hallado el cuerpo sin vida de Jorge Pepis, de 70 años, también por las mismas causas.
Desbordes en Mar del Plata
Mientras tanto, en la zona de Mar del Plata se produjo el desborde de los arroyos Cardalito, Las Chacras, La Tapera y Lobería, este último en Batán. Por ello, fueron evacuadas unas 500 personas, aunque se temía que el número podría aumentar a raíz de las malas condiciones climáticas.
El temporal provocó la voladura de chapas y tejas de techos, la caída de postes de electricidad y de ramas de árboles. La situación determinó que el municipio declarara el estado de emergencia y decidiera suspender las clases en todos los establecimientos públicos y privados, al igual que en Miramar.
En Entre Ríos, que padece estos inconvenientes desde hace varios días, más de 3.600 personas seguían afuera de sus hogares en las ciudades de Concordia y Concepción del Uruguay. Allí, el panorama continuaba siendo complicado debido a que el temporal que azotó anoche la región provocó un aumento en el nivel del río Uruguay, que según los pronósticos, seguirá creciendo.En Concordia, fueron evacuadas unas 3.500 personas, y en Concepción, otras 140.
Deshielos en el sur
La lluvia de los últimos días y el comienzo de los deshielos en la zona cordillerana generó la crecida de los ríos Limay, Neuquén y por ende del Negro, que recibe los caudales de ambos, lo que derivó en complicaciones para numerosas familias que habitan las zonas ribereñas de Río Negro y Neuquén.
Hasta ayer, una decena de viviendas tuvieron que ser desocupadas en el Alto Valle, según informaron fuentes de Defensa Civil, que no tienen pronósticos optimistas para las próximas semanas.
En Neuquén seis familias de evacuados de los barrios Gatica y Tronador eran asistidas en dependencias del municipio por los desbordes del río Limay.
Además de las que ya no están en sus hogares, el municipio neuquino debió asistir a otras familias que decidieron quedarse por temor a sufrir robos si dejaban su propiedad, por lo que hubo entrega de chapas, alimentos y otros bienes para alivianar el impacto de las fuertes crecidas.
Hasta ayer el caudal del Limay rondaba los 1.350 metros cúbicos por segundo. Al igual que el año pasado, la confluencia del Limay con el Neuquén hace del Negro un río con abundante caudal durante esta época, factor que ayudado por el temporal de los últimos días hizo de los barrios ribereños zona de alerta. (Télam y DyN)
La Ciudad
