El intendente Hermes Binner reclamó públicamente ayer que el gobierno provincial concluya las obras sobre el canal Ibarlucea, que resultan indispensables para evitar las inundaciones en el barrio Nuevo Alberdi. Y no anduvo con vueltas al considerar que estos trabajos son "la principal prioridad de saneamiento" que tiene la ciudad. No obstante, el gobernador Carlos Reutemann relegó la licitación de las tareas a la formulación del presupuesto para el año próximo. Y si bien indicó que en la reunión que hoy mantendrá con el presidente Eduardo Duhalde abordarán el tema de los fondos hídricos, advirtió que "las dificultades más grandes en la provincia pasan por la zona de la laguna La Picasa".
El pedido de Binner llegó justamente ayer, en al mismo momento que se conocía que los evacuados en el Batallón de Comunicaciones 121 llegaban a más de 400, en su mayoría mujeres y niños de la zona de Nuevo Alberdi (ver aparte).
"Había que estar anoche (por anteanoche) a las 23, cuando llegaban los ómnibus con la gente que venía desabrigada, con hambre, frío y muy mojada. Realmente era una situación infrahumana y creo que podemos evitarla porque las obras son simples y, para las arcas provinciales, tampoco son excesivamente costosas", advirtió el intendente. Y rápidamente remató: "La verdad es que la gente de esa zona es muy buena y tiene mucha paciencia".
En rigor, esta es la segunda vez que, en una semana, parte del barrio Nuevo Alberdi queda bajo agua. La situación se podría modificar con la canalización de 17 kilómetros del canal Ibarlucea -de los cuales 3,6 están dentro de los límites de la ciudad de Rosario- y otros 16 del Salvat (4,4 en Rosario).
Y si bien la provincia ya intervino unos mil metros del Ibarlucea, aguas arriba, el proyecto quedó inconcluso. Hasta diciembre pasado, reflotar las tareas costaba 4 millones de pesos-dólares. Según el secretario de Obras Públicas de la provincia, Edgardo Berli, las obras están consideradas como "prioritarias" en el plan nacional de defensa hídrica. Pero hasta ahora no fueron licitadas.
Un tema postergado
"El tema ha estado varias veces en carpeta pero se ha postergado. Ahora queremos aprovechar que los hechos están todavía calientes para que se pueda realizar una obra que es muy necesaria", enfatizó Binner.
Pero el gobernador no se mostró muy convencido. "Tenemos que ver toda la situación financiera de la provincia -sostuvo-. El presupuesto de este año ya está cerrado y el del próximo todavía está en estudio, así que aún no sabemos exactamente cuál es el monto de dinero que disponemos para obras públicas y si este proyecto se puede incluir ahí".
El gobernador, que hoy se reunirá con Duhalde, aseguró también que "se podría estudiar el tema del manejo de los fondos hídricos". Es decir, de aquellas partidas que el gobierno nacional constituye mediante el impuesto a los combustibles. Pero en este punto Reutemann fue contundente: "Las dificultades más grandes en la provincia pasan por el tema de la zona de La Picasa".
Otra vez, los vecinos de Nuevo Alberdi tendrán que esperar.