Pese a la fuerte presión que ejerció el presidente Eduardo Duhalde sobre los legisladores para que ratifiquen el cronograma electoral y acepten su renuncia, la conducción justicialista del Congreso se muestra todavía incapaz de llegar a un acuerdo interno que permita encontrar una salida para el conflicto electoral.
Entre los legisladores justicialistas conviven los partidarios de la convocatoria a una Asamblea Legislativa con los que prefieren dejar al Congreso al margen de la disputa por el tema electoral.
En el medio, el presidente del Senado, Juan Carlos Maqueda e integrantes de la conducción del bloque de diputados justicialistas ven posible una resolución de ambas Cámaras para darle fortaleza al cronograma electoral frente a la fragilidad que muestra ante la mirada de la Justicia.
Al mismo tiempo, miembros referenciales de la bancada oficialista del Senado, como José Luis Gioja, Marcelo López Arias y Jorge Yoma, no comparten la idea de un pronunciamiento legislativo sobre el tema.
De hecho Yoma se reunió el domingo por la noche con Duhalde y, según trascendió, le transmitió su criterio de que "no hay clima para ninguna sanción en materia electoral, porque se requiere una mayoría calificada imposible de lograr en las actuales circunstancias".
Obviamente, los diputados duhaldistas avalan el reclamo presidencial y están a favor de una posición activa del Parlamento, que acepte la renuncia de su jefe, suspenda las internas abiertas para evitar nuevos fallos en contra y ratifique la elección del 30 de marzo.
"La salida tiene que ser electoral, hay que facilitar el camino y terminar con excusas judiciales o partidarias para dilatar las elecciones", aseguró el duhaldista Daniel Basile.
Otro diputado de Buenos Aires, José María Díaz Bancalari, consideró que si la Cámara Electoral falla contra la ley de internas abiertas, el Congreso debe convocar a una asamblea para fijar la fecha de los comicios. "Salvo que vayan todos a pedirle a Duhalde que se quede, hay que entregar el gobierno el 25 de mayo", afirmó.
El menemismo quiere garantizar la salida de Duhalde de la Presidencia, y cualquier acuerdo parlamentario aparece subordinado a su objetivo prioritario: realizar las internas en el PJ para asegurar la candidatura del bonaerense.
Eduardo Menem, el principal operador menemista en el Senado, dijo que "no caben dudas de que Duhalde no quiere internas, porque sabe primero que no gana su candidato hasta hoy, que es (José Manuel) De la Sota, pero lo que más le preocupa a él es que gana Menem".
Después agregó: "Como Duhalde tiene una obsesión de que no gane Menem, entonces no quiere que haya internas, y hasta que no asegure cambiar las reglas del juego va a idear algunos tipos de mecanismos para evitar que gane Menem".
Mucha más lejos llegó la diputada menemista Alejandra Oviedo, quien admitió que la estrategia que lleva a cabo el gobierno puede causar "un cisma en el bloque", porque -indicó- "tenemos 45 diputados que adhieren a la fórmula Menem-Romero".
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La Ciudad
