La canción "Aserejé" del trío de españolas Las Ketchup abrió una polémica luego de una denuncia de religiosos que aseguran que su letra llama a ser hereje y al satanismo. Los primeros en censurar la canción fueron los profesores de religión de varias escuelas de San Pedro Sula, Honduras, donde el tema, al igual que en el resto de América aparece en los primeros lugares de preferencia, luego de que arrasara en España y varios países europeos.
La canción cuestionada, con su letra aparentemente absurda, encabeza las carteleras de popularidad en el mundo, y se la acompaña agitando los brazos, golpeándose las rodillas y contorsionando el cuerpo. Las tres hermanas que lo cantan -Lola, Lucía y Pilar- formaron un conjunto hace un año, con el nombre Las Ketchup en homenaje a su padre, el guitarrista flamenco conocido como El Tomate.
La letra, según aseguran las autoras, se basa en retazos de "Rapper's delight", un tema clásico de 1979 del grupo Sugar Hill Gang, modificados por la tonada típica de Andalucía, de donde vienen Las Ketchup.
Las españolas también aseguraron que tantas palabras inteligibles no significan nada. El tema, según dicen, cuenta la historia de Diego, quien va a una discoteca a que le pongan la canción y como no la sabe en inglés se la inventa. El estribillo dice: "Aserejé ja de je de jebe tude jebere sebiunouba majabi an de bugui an de buididipi". Y lo único cierto hasta ahora es que se impuso en las pistas de baile y las ondas de radio durante el verano europeo, hasta convertirse en la canción de la temporada de vacaciones.
Los religiosos que cuestionan la extraña letra hacen sus propias interpretaciones de las diferentes palabras. Según dicen, "Aserejé" significa "sé hereje", "ja" son "las siglas de Jehová", "dejebe tu dejé" pide "dejar de ser tú", "Diego" significa "el Diablo" y "traje de agua marina" es "azul, el color preferido de Satanás".
Prohibición
La primera reacción en concreto contra la canción se produjo en Honduras, donde profesores de religión de varias escuelas recomendaron a sus alumnos que dejen de escuchar el tema porque consideran que contiene mensajes satánicos.
"Parece que es una canción diabólica. El profesor de religión se enteró por noticias internacionales que había mensajes ocultos en ella y nos dijo que no siguiéramos cantándola", afirmó Reina Hernández, de 11 años, alumna de quinto grado de la escuela Beracah.
Hernández y sus compañeros de escuela aseguraron que a ellos les gustaba mucho la canción pero no la escuchan desde el jueves pasado, cuando el profesor de religión les hizo la advertencia. "Mi hermana era una fanática. Le gustaba mucho la canción. Apenas tiene un añito y la bailaba siempre que la oía, pero en mi casa ya no lo hacemos porque me explicaron en la escuela que significa algo maligno", declaró Andrés Colindres, de 9 años, estudiante del tercer grado de la misma escuela.
La profesora de religión del Instituto Evangélico, la monja Martha Lidia Fuentes, señaló que simplemente les pidió a sus alumnas "que tomen conciencia crítica y que por sí solas vayan descubriendo lo que vale la pena escuchar y qué canciones deben descartar".