Una menor impidió a golpes que la violaran

Tiene 13 años. Dos hombres la atacaron en un descampado. Uno de ellos habría actuado en otro caso

Una chica de 13 años se salvó de ser ultrajada sexualmente en un descampado de la zona sudoeste de la ciudad por dos delincuentes al ofrecer una tenaz y desesperada resistencia. Para los investigadores policiales este es el segundo caso de esas características que ocurre en el mismo sector en los cuales las víctimas brindaron una descripción física muy similar de uno de los acusados.
El último de esos episodios fue denunciado en el Centro de Atención a las Víctimas de Delitos Sexuales y sucedió el viernes alrededor de las 16, cuando una pareja de novios domiciliados en la zona cercana a la aceitera Santa Clara (avenida Uriburu al 3300) se dirigían a pie hacia un club del barrio Acíndar donde practican deporte. La chica tiene 13 años y su pareja 14. Sus datos personales se mantienen en reserva por cuestiones legales.
Los novios caminaban por una calle de tierra en una zona rural ubicada al oeste de la mencionada planta industrial cuando aparecieron dos hombres adultos. Uno de ellos parecía tener entre 25 y 30 años, mientras que el otro sería mayor. En principio todo parecía tratarse de un simple robo. Los delincuentes esgrimieron una navaja con la que pretendieron inmovilizar al muchacho.
Pero según fuentes policiales, el adolescente alcanzó a zafarse y separarse unos metros de los agresores. "Corré y llamá a la policía", le gritó su novia mientras el muchacho enfilaba hacia la garita de vigilancia de la empresa. El chico fue perseguido por uno de los asaltantes, pero logró escapar. Entonces, los depravados tomaron de un brazo a la chica y la arrastraron hasta un lugar con maleza y yuyales altos con toda la intención de ocultarse y someterla sexualmente.
Fuentes policiales contaron que primero intentó violarla uno de los hombres mientras el otro hacía de "campana". Pero al observar que la chica no se entregaba decidieron forzarla los dos juntos. No obstante, la menor se resistió violentamente a fuerza de puntapiés y forcejeos. .
Gracias al aviso que el chico había alcanzado a dar a la policía poco después se realizó un rastrillaje en la zona sin resultados positivos. La menor brindó todos los detalles del ataque en la "comisaría de la mujer", que funciona en los altos de la seccional 5ª. Allí llegó con su ropa parcialmente desgarrada y exhibiendo algunos hematomas en su rostro. Ante las mujeres policías, brindó una pormenorizada descripción de los hombres que intentaron ultrajarla.
Una fuente policial indicó que la versión de la chica tenía coincidencias notables con un hecho ocurrido en enero de este año en la misma zona, en el cual otra menor logró escapar de una violación. "Lo que más llama la atención es que la descripción física de uno de los agresores es igual en los mismos casos", sostuvo.