Año CXXXV
 Nº 49.633
Rosario,
miércoles  16 de
octubre de 2002
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Boca: Tabárez enfrenta otra tormenta
La caída ante Colón revivió los fantasmas de una posible renuncia, aunque él está decidido a no irse

La caída ante Colón en Santa Fe, que alejó al equipo de los primeros lugares del torneo Apertura, desató otra tormenta interna en el plantel de Boca Juniors, pero el cuestionado entrenador uruguayo Oscar Tabárez está decidido a no dejar su puesto y recién se desvinculará de la entidad en diciembre próximo, cuando finalice su contrato.
Tabárez, según diversas fuentes consultadas, dirigirá por última vez a Boca el 1º de diciembre, cuando el equipo enfrente a Central por la última fecha del torneo Apertura.
Ayer el plantel retornó a las prácticas en el complejo de Casa Amarilla con vistas al cotejo del domingo próximo ante Chacarita Juniors y Tabárez ya tiene pensado excluir del equipo titular a Roberto Pampa Sosa.
El ex delantero de Gimnasia manifestó su malestar por la situación de postergación que vive dentro del equipo, emulando los dichos de su compañero Raúl Estévez, quien también se quejó por la falta de diálogo que tiene el entrenador con los futbolistas.
"Esta situación no me la banco más. Siempre el cambio es por mí o por Clemente Rodríguez, porque no somos de esos jugadores que hablan. Pero se acabó, ante Colón estábamos perdiendo y creo que merecía seguir en el equipo", expresó el delantero.
Sosa, desde que llegó proveniente del Udinese italiano, jugó 483 minutos en Boca, incluido un partido completo en La Plata ante Gimnasia por la Copa Sudamericana, y no convirtió ningún gol.
"Tabárez se deja llevar por el griterío de la gente. El dice que los medios lo persiguen y eso lo termina traicionando", sostuvo el jugador.
Los dichos de Sosa molestaron al entrenador, pero estos conceptos no serán el motivo de su exclusión. Es que el director técnico considera que, de ahora en más, la dupla atacante debe estar integrada por Guillermo Barros Schelotto y Marcelo Delgado.
Tabárez quiere que el Mellizo juegue 90 minutos continuados para estar físicamente a punto para el clásico ante River, que se jugará en el Monumental dentro de 13 días.
Apoyado por los principales dirigentes, entre ellos el presidente Mauricio Macri -partidario a rajatabla de respetar los contratos firmados-, Tabárez reunió ayer a sus jugadores y le habló a un plantel caído anímicamente, que ahora sólo pretende "ganarle a River e Independiente" para mejorar la pálida imagen demostrada hasta el momento.
Pese a que en las últimas horas arreciaron las versiones en el sentido de que si Boca vuelve a sufrir una nueva derrota, esta vez a manos de Chacarita, Tabárez se iría, algunas fuentes sostienen que es firme la postura del entrenador de continuar al frente del equipo.
Desde que Tabárez volvió al club, Boca no ganó ningún clásico local, perdió el torneo Clausura -se lo adjudicó River- y quedó eliminado en los cuartos de final de la Copa Libertadores (por Olimpia de Paraguay) cuando Boca era defensor del título.
La última frustración fue haber quedado afuera de la Copa Sudamericana tras caer en La Plata ante Gimnasia (3-1) y obtener un empate (0-0), en Salta, ante el mismo rival.
"Debemos buscar nuevos objetivos. Todavía nos quedan cosas por pelear, como por ejemplo el partido con River", expresó Tabárez como mejor argumento cuando habló sobre su situación en Boca. (Télam)



El DT dijo que se quedará hasta el fin del contrato.
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