El regreso a casa después del fin de semana largo

Hasta hoy no había más pasajes para retornar a la Capital Federal

Los servicios, incluidos los refuerzos, llegaban y salían repletos. En las rutas también se notó mayor movimiento

El regreso a casa tras el fin de semana largo se sintió más en el Terminal de Omnibus Mariano Moreno. Es que a última hora de la tarde de ayer se convirtió en un incesante ida y vuelta entre los pasajeros que llegaban con sus bolsos cargados y los que pugnaban por retornar. Y en especial a Capital Federal, destino con servicios agotados hasta la madrugada de hoy, ya desde la media tarde. La demanda de pasajes superó las expectativas; es más, hubo gente que no pudo retornar debido a la falta de asientos y porque algunas empresas no agregaron refuerzos. Pero no alcanzó al movimiento registrado en la última Semana Santa, cuando hubo cinco días para el descanso.
Un panorama similar se observó en los accesos a la ciudad. Las estaciones de peaje trabajaron con todas sus cabinas disponibles y en los horarios pico se notó una mayor afluencia de autos, micros y camiones que en otras ocasiones, aunque no hubo colas ni demoras.
Según la Secretaría de Turismo y Deportes de la Nación, unas 800 mil personas se movilizaron durante el fin de semana largo a las distintas plazas turísticas del país, en particular a la costa atlántica y a las provincias de Córdoba, Salta, San Luis y Entre Ríos.
Los porteños completaron un 90 por ciento de la capacidad hotelera de Rosario. Y volver les resultó difícil. Es que no había pasajes. Anoche, la empresa Ruta 9 recién tenía disponibles lugares para las 13.30 de hoy, y en las otras compañías se podía conseguir un asiento para después de la medianoche. Y eso que Chevallier llegó a fletar cuatro servicios por hora.
Los micros que arribaron a Rosario también estaban llenos, refuerzos incluidos, ya sea desde los puntos turísticos -Carlos Paz, Calamuchita y Mar del Plata fueron los más demandados- como de las localidades aledañas a Rosario.
Los boleteros coincidieron en que no se esperaba una demanda semejante, superior a la de otros feriados, pero nada que ver con la anterior Semana Santa.
El litoral (Federación, Concordia, Colón, Villa Elisa) y las Termas de Río Hondo dieron la nota. "Hubo gente que se quedó varada hasta mañana (por hoy) porque no consiguió pasaje", señalaron en la ventanilla de Flecha Bus. Es que no se pusieron los suficientes refuerzos y en especial los estudiantes se quedaron a pie, según se supo.
La densidad de tránsito en las rutas fue en aumento a medida que se acercó la noche. Y se complicó más en la autopista a Buenos Aires debido a la cantidad de autos, colectivos y camiones que transitaron más de lo habitual. Y encima la lluvia, que anegó distintos sectores de la calzada como debajo del puente en el ingreso a San Nicolás obligando a desviar el tránsito por los accesos.
La ruta 9 también estuvo muy cargada. El promedio de vehículos/hora fue de 500 a la altura del peaje de Carcarañá, alrededor de las 19. "Pasa el doble de coches que en un día normal. Esto es inusual con respecto a otros feriados", dijo el encargado de la cabina de Jaimes Craik.
Los corredores de la 34 y de la doble mano a Santa Fe tuvieron un promedio de 200 y 500 vehículos/hora respectivamente. Sobre las rutas 33 y 14, el flujo vehicular fue continuo.

La Terminal se convirtió ayer en un incesante ida y vuelta. (Foto: Enrique Rodríguez)