Cañada de Gómez. - Las escuelas públicas cañadenses resolvieron no asistir a los actos oficiales programados por el municipio de aquí hasta fin de año, como forma de protesta por la abultada deuda de más de 400 mil pesos (once trimestres) que mantiene la actual administración municipal con el Fondo de Asistencia Educativa (FAE).
Directores y cooperadores analizaron diversas propuestas de acción y la de mayor consenso fue hacer un quite total de colaboración con la no asistencia de alumnos, directivos y cooperadores a los actos oficiales. La primera muestra fue hace diez días, cuando la ciudad celebraba sus ochenta años en la plaza de las Colectividades. Asimismo, anteayer asistieron muy pocos alumnos de escuelas públicas a un espectáculo coral que formaba parte de los festejos por el aniversario.
Los concejales aliancistas Ariel Minuet y Humberto Acánfora apoyaron la medida y tampoco asistieron a estos actos. Ambos coincidieron en apoyar a las escuelas públicas "porque la administración municipal no tiene en cuenta la educación" y remarcaron que "no hay en las actuales autoridades un consenso favorable para arreglar esa deuda".
Pero no toda la oposición política se embanderó con esa posición. El también aliancista Abel Romegialli apoyó el reclamo de los cooperadores, pero no la medida, igual que el presidente del cuerpo, Juan Carlos Abbondanzieri, quien pidió a directores y cooperadores que reflexionaran porque Cañada de Gómez "cumple 80 años una sola vez y no hay que confundir decisiones políticas con actos que son de la ciudad".
"Ellos no colaboran"
Por su parte, los cooperadores Elías Caruso y José María Belardinelli fundamentaron las medidas: "Nos piden que colaboremos y los funcionarios no colaboran con las escuelas. Alguna medida había que tomar. Lamentablemente coincide con los 80 años de la ciudad".\La ausencia de alumnos de escuelas públicas ya se hizo notar en la plaza de las Colectividades donde se realizó el acto central por el aniversario. Y antes de ayer continuaron los actos en la plaza San Martín donde mil voces le cantaron a la ciudad. En ese marco, eran muy pocos los representantes de las escuelas públicas cañadenses que habían asistido.