| | cartas Por fin tendremos un casino
| Ahora que el casino será una realidad, empiezan a discutir por el lugar para ubicarlo. Dado que el intendente Binner sigue atado a viejos anacronismos -por eso estamos como estamos en Rosario- ha propuesto para instalarlo, casi con desprecio, la ex estación Central Córdoba. No me parece un lugar adecuado para que se instale: en un páramo, lejos de locales comerciales, hoteles y restaurantes, sobre todo. Porque no es lógico pensar que el casino será solamente patrimonio de rosarinos adictos al juego. El proyecto debe pensarse en función de atraer turistas, nacionales y extranjeros, debe facilitarse un cómodo traslado de las personas que vengan a visitarnos. Además traerá inversiones de todo tipo y fundamentalmente, trabajo. Una parte de los ingresos del juego va al área social. Hay que terminar con los muros de viejas ideologías. El mejor whisky escocés no es para los escoceses, se exporta; la cuota Hilton argentina no es para el consumo interno, se exporta. De última, el que no quiera el casino, tiene la opción de no ir. Martina Fos
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