Año CXXXV
 Nº 49.625
Rosario,
martes  08 de
octubre de 2002
Min 14º
Máx 23º
 
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cartas
Por amor a Bernardo

En la zona de Rioja y Callao atiende un veterinario en quien yo confié la salud de mi perro de raza basset hound y me defraudó al no asistirlo debidamente en una emergencia. Cuando un animalito sale de una cirugía debe estar en observación como mínimo 24 horas junto con el médico en su clínica. Pero no fue así, ya que Bernardo volvió a casa recién operado. Cuando pasó el efecto de la anestesia el perrito se quejaba y tuve que ir personalmente hasta la veterinaria en busca de un analgésico, el cual tuve yo -su dueña- que inyectarlo, igual que el suero y el antivomitivo, ya que estaba deshidratado. Doctor, yo sé que el perro era adulto, pero podría haber vivido un poco más si hubiera tenido mejor asistencia médica por parte suya. Hasta el día de hoy estoy esperando su llamado para aliviar mi dolor y ofrecerme una disculpa por el abrupto desenlace que conmocionó a todo aquel que conocía a mi mascota.
DNI 22.777.915


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