Año CXXXV
 Nº 49.620
Rosario,
jueves  03 de
octubre de 2002
Min 15º
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cartas
No opinar si no hay certeza

Me dirijo a ustedes para transmitirles una inquietud que desde hace tiempo tengo al leer las noticias del diario. No soy periodista pero tengo entendido que aparte de comunicar deben transmitir la verdad a los lectores. Desde hace tiempo veo un ataque frontal a monseñor Storni. Me preocupa, pero no es lo más fundamental. Lo que de veras me pesa es que publican noticias basadas en testigos o en personas que hablan con soltura del comportamiento de dicho ministro de la Iglesia. Si es verdad lo que dicen, ya habrá quien lo juzgue en su momento, pero si no lo es están haciendo un daño muy grande a la buena fama e integridad de una persona. Cuentan de una persona con mucho sentido común que al enterarse de otra que había calumniado le dijo que intentara recoger las plumas de una gallina que había desplumado en el camino, al manifestar la imposibilidad de hacerlo porque estarían ya desparramadas, le dijo el interlocutor, eso mismo pasó con la fama de esa persona de la cual habló, es imposible volver a recuperarla. Esta anécdota me hace pensar, no lo tome como un ataque ni mucho menos, tómelo cómo una opinión de una persona a la que duele la injusticia que se hace con este sacerdote, si lo que dicen no fuera tan cierto. Uno debe emitir una opinión a quien corresponde cuando hay plena certeza de lo que se dice. Yo pienso en mis padres, ustedes piensen en los suyos y verían cómo duele si la acusación no fuera cierta. Sin otro particular, me despido muy atentamente, esperando que consideren este tema al momento de publicar del modo en que se está haciendo.
Inés Alvarez


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