Divulgan un catálogo del programa de preservación

Proponen subsidiar inmuebles de alto valor arquitectónico

Estrategia oficial para evitar la demolición de viviendas en el casco céntrico. Relevaron 2 mil sitios de interés

Lucas Ameriso / La Capital

La directora del programa de Preservación del Patrimonio Arquitectónico y Urbanístico de la ciudad, Bibiana Cicutti, reveló un nuevo mecanismo para evitar que los inmuebles que tienen valor arquitectónico zafen de la picota. "Hay que otorgar incentivos económicos a los interesados en adherir al programa. Ya sea a través de subsidios o planes financieros", consideró la funcionaria.
Ayer se dio a conocer un catálogo municipal que contiene unas dos mil construcciones que revisten interés histórico. El material, recopilado casi a lo largo de una década, servirá de base para circuitos turísticos por el casco céntrico que realizará el Ente Turístico Rosario (Etur).
"Rosario y su patrimonio" rescata edificios y sitios de valor patrimonial en el área central, que datan de 1852 en adelante. Las construcciones relevadas fueron clasificadas en obras de valor singular y de conjunto, en la zona delimitada por Oroño, Pellegrini y el río.
Los más de 2.000 mil sitios registrados conforman diversos paseos turísticos agrupados por épocas arquitectónicas. La información se volcó en un mapa que, con formato de folleto, será divulgado por el Etur y se entregó a instituciones intermedias y educativas de Rosario.
Cicutti reconoció que "por más que la vivienda figure en el programa de preservación del patrimonio puede ser demolida", pero puso sobre el tapete una insospechada estrategia para alejarlas de la topadora. "Hay que otorgar incentivos económicos a las personas que adhieran al programa municipal. Estos incentivos pueden darse a través de una quita en gravámenes, subsidios o planes financieros", detalló la funcionaria.
Y reconoció: "No basta con confeccionar un folleto, sino que es necesario un incentivo, aunque sea poco". La propuesta "es una señal que hay que dar, para que el privado reconozca que su propiedad tiene un valor patrimonial", explicó.
-¿Debería existir una ley provincial para impedir las demoliciones de estos edificios?
-No buscamos impedir sino regular. Si se establecen índices de edificación en determinadas zonas, a un particular le resulta más costoso construir si existe determinadas reglas. Quizá así tenga que repensar su inversión y busque preservar el inmueble que tenía. Más que la prohibición buscamos la promoción. Se exige hasta un punto. No creo provechoso que el Estado se llene de propiedades adquiridas por expropiación, para luego poner museos que no se puedan mantener.
-En lo concreto, ¿el municipio ha impulsado algún proyecto ante la Legislatura provincial?
-Sí, el bloque socialista presentó un proyecto para preservar inmuebles en la provincia. Pero a veces las leyes no salen porque hay muchos intereses en juego. Uno trabaja sobre terrenos que son de privados y de alguna manera esto molesta. Hay que convencer a la gente de que la preservación es un beneficio para todos.
-¿No plantearon la posibilidad de cooperar con el privado para revitalizar los frentes de los edificios históricos?
-El programa se interesó en comprar una hidrolavadora para ayudar con la limpieza del frente. Es más un apoyo simbólico, pero entendemos que sería válido.