Racing Club y San Lorenzo de Almagro hicieron vibrar anoche al Cilindro de Avellaneda y empataron 1 a 1.
Tanto Racing como San Lorenzo ratificaron que son equipos en plena evolución, aunque esta igualdad puede demorarlos en sus intentos por aproximarse a Independiente, el único líder del torneo Apertura, que todavía debe visitar a Huracán.
Los azulgranas sacaron ventaja por una demostración de idoneidad que estuvo a cargo de Alberto Acosta, a los 39 minutos del primer tiempo, y Racing sacó a relucir su capacidad para responder y logró la paridad mediante un penal que convirtió el colombiano Gerardo Bedoya, a los 10 de la segunda mitad del cotejo.
Racing y San Lorenzo ofrecieron un primer tiempo muy entretenido, con mucho ritmo, con dientes apretados, casi un aperitivo de lo que van a ser los duelos coperos por la Sudamericana.
Fue un capítulo de constante ida y vuelta, con numerosas situaciones como para convertir, en su mayoría para San Lorenzo. El equipo de Insua fue el más profundo y justificó la ventaja parcial porque en ataque tuvo mayor peso.
Racing, como en los clásicos recientes frente a Boca Juniors y River Plate, tuvo un flojo primer período y se vio desbordado por un San Lorenzo que salió a ganar desde el minuto inicial, ya que pretende pelear por el título.
Acosta definió con maestría, con gran jerarquía, con una frialdad difícil de igualar y una precisión admirable. El artillero se separó de su marcador, evitó la posición adelantada, dominó la pelota, observó cómo Gustavo Campagnuolo intentaba taparle la chance y resolvió con un toque cruzado, esquinado y perfecto. Los de Boedo triplicaron en proporción las llegadas, pero en una de las dos oportunidades de las que dispuso Racing hubo un zurdazo de Bedoya desde fuera del área grande que pegó en el travesaño.
El trámite fue muy emotivo también en la segunda etapa. Fue notable la reacción de Racing, que salió decidido a empatar el partido.
El equipo de Osvaldo Ardiles mejoró su producción, pero Zurita y el paraguayo Claudio Morel Rodríguez fueron importantes para contener al rival.
De todos modos, una incursión de Diego Milito muy veloz derivó en al infracción de Sebastián Saja y Bedoya acertó en la ejecución del penal.
El clásico terminó con dramatismo por lo incierto del resultado y porque los dos equipos se esforzaron por vencer. (DyN)
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La Ciudad
